A fuerza de sacrificio y compromiso con la comunidad
El deseo de entrenar a chicos fuera del sistema y las ganas de jugar en torneos de fútbol amateur fueron dos de los factores que llevaron al desarrollo de Racing de Necochea
El torneo de la Liga Independiente de Fútbol Amateur concentra gran parte de su actividad en la cancha de Racing de Necochea.
El predio ubicado en los Capuchinos, que hasta hace unos años era un baldío, se ha convertido en un ejemplo de cómo el sacrificio y el compromiso con la comunidad pueden convertir espacios y hacer surgir grandes proyectos allí donde no había nada.
Y la historia de Racing de Necochea está muy vinculada a la historia de un técnico de fútbol que tenía un sueño y decidió seguir adelante contra toda adversidad.
“Antes de la pandemia, con Jorge Casaprima íbamos a hacer un proyecto de alto rendimiento para chicos que estaban fuera del sistema”, explicó José Luis D’Ercoli.
Cuando comenzó con aquel proyecto se dio cuenta de que no había ningún predio donde poder llevar un proyecto de esas características, por lo que empezó a buscar uno.
Fue así como a través de gestiones ante el Instituto Nuestra Señora de Nueva Pompeya y el Club Huracán, obtuvo el permiso para utilizar el predio de lo que era la vieja cancha de Capuchinos.
Mientras tanto, la filial Necochea de Racing Club le pidió a D’Ercoli que fuera el entrenador de un equipo con el que los afiliados locales de la Academia pretendían jugar en la LIFA.
En tanto D’Ercoli seguía avanzando prácticamente en soledad con la puesta en condiciones del predio de Capuchinos, el proyecto de alto rendimiento se cayó y la filial de Racing desapareció.
No obstante, eso no detuvo a D’Ercoli, que con el equipo de Racing de Necochea comenzó a competir el año pasado en los torneos de la LIFA.
Desde entonces, con el apoyo de jugadores y familiares, el club siguió adelante y logró un importante crecimiento.
Además de contar en la actualidad con un equipo masculino y un femenino para competir en los torneos de LIFA, la joven entidad también brinda entrenamiento a unos 70 chicos del barrio.
Estar en todo
“Son 10 o 12 familias la que están trabajando para que Racing siga adelante. Porque Racing es una familia”, dijo D’Ercoli, que durante la semana no sólo entrena a los jugadores, también corta el césped de la cancha y pinta las líneas de cal del campo de juego.
El apasionado trabajo de D’Ercoli no sólo ha tenido impacto en el rápido crecimiento de este club de barrio, también ha dado resultados deportivos, ya que el año pasado Racing ganó tres torneos y ocho jugadores fueron convocados para participar en la Liga Necochea de Fútbol.
Aunque el principal interés del técnico parece ser continuar entrenando a chicos de todas las edades y sacarlos de la calle.
Así que no sólo hay entrenamiento de fútbol en el predio, también hay partidos de voley y se realizan campamentos.
D’Ercoli está interesado en destacar principalmente este trabajo de inclusión social y los vínculos en red con otras instituciones dedicadas también a la labor comunitaria.
Aunque, destaca que el trabajo no siempre es gratificante, ya que muchas veces se trata de una labor solitaria y a veces pagas con sinsabores con los robos que ha sufrido la entidad en los últimos años.
“Nos hay robado en el predio al menos ocho veces”, dijo D’Ercoli. Pero lejos de desanimarlo, eso parece confirmar una de sus principales certezas: “Esto es todo sacrificio”.
Ahora con la familia del club proyectan terminar con la iluminación del predio para el verano, también forestar y colocar parrillas. Además existe la posibilidad de construir una cancha de bochas con medidas reglamentarias para incorporar otra actividad a la institución.////