La preocupante realidad que muestran las estadísticas sobre violencia de género y abusos sexuales quedaron reflejados en los fallos dados a conocer este lunes por el Tribunal en lo Criminal Nº 1 en relación a dos resonantes casos.

Los imputados, cuyos datos filiatorios no se dan a conocer para preservar las identidades de las víctimas, fueron condenados a 28 años de prisión y a 11, respectivamente.

Violencia irracional

El individuo que recibió la pena más dura fue enjuiciado por abuso sexual en perjuicio de su propia hija, pero también por tentativa de homicidio, hurto y lesiones leves.

Este lunes los jueces Luciana Irigoyen Testa, Ernesto Juliano y Alejandra Manis del Tribunal en lo Criminal Nº 1 del Departamento Judicial Necochea dictaron sentencia en el marco de las causas “abuso sexual con acceso carnal agravado por ser ascendiente de la victima y por aprovechamiento de la situación de convivencia preexistente con la victima” y su acumulada por “homicidio agravado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa” (dos hechos), “hurto en concurso real” y “lesiones leves”.

Durante su alegato el fiscal Walter Pierrestegui había solicitado que se le impusiera al imputado una pena de 45 años de prisión, accesorias legales y costas.

Ayer el tribunal condenó al imputado, apodado “Cachami”, a la pena de 28 años de prisión, accesorias legales y costas, por resultar autor penalmente responsable del delito de abuso sexual con acceso carnal en perjuicio de una menor de edad y también de los otros hechos que se le imputaban.

Once años de prisión

Por otra parten, la jueza Luciana Irigoyen Testa, integrante del Tribunal en lo Criminal nº 1 del Departamento Judicial Necochea, dictó veredicto y sentencia en el marco de un juicio abreviado por abuso sexual.

En ese fallo, el imputado fue condenado a 11 años de prisión. La víctima es en este caso la propia hija del condenado. 

La adolescente fue quien relató los abusos mediante el dispositivo de la Cámara Gesell.

Los hechos ocurrieron entre junio de 2015 y  junio de 2018, cuando la niña tenía entre 6 y 9 años de edad, y luego entre julio de 2018 y septiembre de 2021, cuando menor ya tenía entre 10 y 13 años de edad.

El 13 de septiembre de 2022, la madre de la menor denunció que recibió un llamado del Servicio Local en el que se le informó que su hija de 14 años había contado en una entrevista que fue abusada por su padre.

Por otra parte, al hombre también se lo juzgó por amenazas en contra de su ex pareja y por daños.

Por estas causas, la jueza decidió condenar al imputado a 11 años de prisión, accesorias legales y costas.///