Control y responsabilidad
A partir de la elaboración de estadísticas, el municipio busca prevenir accidentes y disminuir la siniestralidad en todo el distrito. Sin embargo, también es necesario reforzar los controles y apuntar a campañas para concientizar a los conductores que parecen no entender los peligros del tránsito.
El principal problema en las calles sigue siendo la circulación excesiva de motos, que no cumplen las normas y también son ellos mismos –los motociclistas- los más afectados. Entre las faltas más comunes, figuran el no uso de casco con el riesgo que implica, la falta de luces y las maniobras a alta velocidad y arriesgadas que sorprenden por derecha o izquierda al automovilista más atento.
Durante la cuarentena más estricta, con la menor circulación de vehículos, los accidentes habían disminuido. Sin embargo, con la normalización de la actividad y la cantidad de motos que se dedican al delivery, pareciera que la situación se agravó. En lo que va del año, murieron cuatro personas que circulaban en moto y otro tanto resultó herido y terminó en el Hospital.
A esta situación, se suma que varios inspectores están asignados a controlar los accesos a las rutas, lo que significa que hay menos personal en la calle. Ahora, se prevé que para el 15 de noviembre se levantarían los retenes, por lo que se espera que se refuerce el control sobre todo en horarios picos no sólo para prevenir accidentes sino también para organizar el tránsito, sobre todo en el centro, para evitar la doble fila y regular la descarga de mercadería.
A principio de mes, la Dirección de Tránsito del municipio labró en diez días un total de 47 contravenciones a todo tipo de vehículos. El uso del celular al conducir, encabezó las multas, seguido de cerca por vehículos estacionados en lugares no permitidos. También se infraccionó por falta de documentación, circulación por zonas prohibidas, maniobras imprudentes, cruce con semáforo en rojo o giro a la izquierda, entre otras.
El control, por parte del municipio, es fundamental para organizar el tránsito y advertir a los automovilistas que venían demasiado relajados y cada vez incumplían más las normas.
Sin embargo, también se requiere mayor responsabilidad de los ciudadanos, de los que andan en moto, en auto y también los peatones que no cruzan en las esquinas y se largan sin mirar, poniendo en riesgo sus vidas.///