¿Cuáles son las causas de los dolores de cintura?
La kinesióloga, Analía Solís, habló sobre el tema y se refirió a las hernias de disco
Analía Solís, kinesióloga y columnista del programa radial “Desde Temprano”, el cual se emite por Ecos Radio, habló sobre las dolencias de cintura en mujeres y hombres, se refirió a las hernias de disco, y destacó cuáles son las causantes que nos llevan a estas sentir estas molestias desde la óptica del Método Busquet, especialidad en la que se desarrolla.
En principio, apuntó a que no hay edad para la aparición de estos dolores, hay una variedad de causas que lo generan. “Hay miles de fundamentos, pero hay que quedarse tranquilo”, destacó.
Haciendo eje en las hernias de disco, explicó que el 90% de los casos no son operables, ya que la profesional sugiere realizar un tratamiento conservador que no incluya cirugía, también destacó que, en algunos casos, estas suelen ser asintomáticas. “Las personas se dan cuenta que tienen una hernia cuando sienten dolor, y ahí se realizan una resonancia, a partir de eso también surgen otras cuestiones, es decir, en algún momento las fuiste construyendo, no digo que no pueda ocurrir que uno no se pueda herniar en un momento determinado, pero son los menos, una artrosis no se fabrica de un día para el otro”, comentó.
¿Dónde inicia el dolor?
Analía resaltó que lo estructural no tiene nada que ver con el dolor, y que hay dos cuestiones distintas a replantearse en esta situación. Principalmente pensar donde comenzó este dolor, “nosotros, desde el Método Busquet en el consultorio, el cual tiene una mirada más generalizada de la kinesiología, trabajamos en encontrar la causa real del problema, nuestra pregunta inicia en como arranco el dolor”, explicó.
Destacó que hay veces en las que nos acordamos la fecha exacta de cuando se generó el dolor ya sea por una causa determinante como una caída o un golpe, y que eso se relaciona con algo traumático. “Muchas veces el dolor empieza despacito, silencioso, todos los días un poco más, aumenta y aumenta, hasta que me doy cuenta de que no lo puedo resolver por mis propios medios y voy tomando una solución al respecto”, comentó.
Mencionó que algunos dolores son más rápidos y otros transitan más lentos, aquellos que son rápidos son de un gran beneficio ya que hablamos de algo que se irá solucionando con más velocidad, si estamos mucho tiempo con el mismo dolor, es difícil que desaparezca en 2 o 3 sesiones. A raíz de lo último mencionado, la kinesióloga apuntó a la importancia de saber que, si se logra trabajarlo, pero de una manera más paulatina, “darle la esperanza a los pacientes de que sí es posible tratarlo y ver los resultados”, explicó.
“Hay que hacerse cargo de la situación”
La profesional se refirió a que hay dos tipos de arranque en cuanto a dolor y aseguró que hay que hacerse cargo de la situación. Explicó que cuando el tipo de dolor es aquel que me acuerdo de la fecha, eso significa que hubo un evento traumático determinable y que probablemente, el problema sea estructural ya que hubo una acción que determinó que eso pasara, en esos casos, destacó que es otro el tipo de tratamiento.
“Cuando un nervio se irrita empieza a generar un montón de cosas… la mayoría de las veces viene de una compresión nerviosa, las tensiones musculares presionan a la fascia y en ese apretar estrecho el nervio y es como apretar una manguera con agua, no corre o lo hace de un lado para el otro con mucha fuerza”, explicó. Remarcó que en el nervio pasa lo mismo, no siento o siento mucho el dolor, mencionó que estos son resultados de la irritación de un nervio, y que a partir de esto el tratamiento será aliviado a detener la compresión del nervio.
“No hay buenos o malos movimientos, si lo podés hacer es porque tu anatomía lo permite”, detalló y agregó: “Cuando hay una inflamación por ejemplo en las vísceras, nuestro cerebro capta esa información y todos nuestros músculos se ponen en predisposición para cuidar a los órganos”.
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