Dos meses sin pistas del audaz robo a un comercio céntrico
En septiembre boqueteros ingresaron a una verdulería de la calle 64
A dos meses del robo ocurrido en el local de venta de frutas y verduras más grande del centro, no se ha producido ningún avance en la investigación y el hecho parece cada vez más lejos de esclarecerse.
Entre el 26 y 27 de septiembre pasado, delincuentes ingresaron al Emporio de la Fruta, en la calle 64 entre 63 y 65, violentaron dos cajas fuertes y se llevaron toda la recaudación del fin de semana, dinero en su mayor parte destinado al pago de sueldos y de proveedores.
Fue uno de los más cuantiosos robos de los últimos meses, ya que los delincuentes se llevaron más de 500.000 pesos.
Pero lo más preocupante para el propietario del comercio fue advertir que los delincuentes tenían un conocimiento certero del local. Subieron a los techos del negocio, hicieron tres agujeros en una oficina administrativa y en ese lugar violaron dos cajas fuertes, utilizando amoladoras y barretas de hierro.
La banda de ladrones fue muy “prolija” para cortar un cuadrado de la caja fuerte principal de más de un metro de altura y tuvo el tiempo suficiente para violentar otro depósito de valores empotrado en una pared.
Se cree que accedieron al techo del negocio luego de recorrer casi 100 metros, se cree que desde un inmueble abandonado ubicado sobre la calle 62.
Luego, dentro de la oficina administrativa, redujeron sus movimientos para no ser detectados por el sistema de alarmas.
La investigación
Lo primero que hicieron los investigadores fue solicitar imágenes de las cámaras de seguridad de la cuadra de calle 64 entre 63 y 65, pero no se logró ningún resultado.
También se solicitaron imágenes de la cuadra de calle 62 entre 63 y 65 a fin de determinar si alguna cámara registró imágenes del accionar del grupo delictivo.
Cabe señalar que el local se encuentra junto a un terreno ubicado en la esquina de 64 y 63 que es utilizado como estacionamiento.
Una de las hipótesis de la Policía es que la banda accedió por un inmueble abandonado que se encuentra sobre calle 62 y cuyo patio externo se conecta con el predio donde se emplaza el negocio de Juan José Liuzzi.
Boqueteros
El personal policial colectó rastros en la oficina administrativa donde se hallaba una caja fuerte de más de un metro de altura y otro depósito de valores empotrado en una pared.
Las características del robo permitiría sospechar que fue cometido por personas con conocimiento sobre cómo violentar una caja fuerte y también sobre desplazamientos en altura y sistemas de alarmas.
En los últimos años, bandas de boqueteros han cometido gran cantidad de robos en la ciudad. Muchos de estos casos nunca pudieron ser esclarecidos.
Son recordados los robos cometidos por boqueteros en el supermercado mayorista de la avenida 75 entre 64 y 66 y dos ocurridos en CLC, en la avenida 59 entre 42 y 44.
Si bien se podría creer que este tipo de robo puede ser cometido por cualquier delincuente, indudablemente requiere de labores de inteligencia previa para conocer la existencia de cajas fuertes, ubicaciones de sistemas de alarma y características de los edificios a los que se va a ingresar. Además del conocimiento de las herramientas necesarias para violentar cajas de valores.
Todo ello indica que el robo sólo pudo haber sido cometido por una banda de boqueteros y no sería de extrañar que pronto se produzca otro robo de estas características.///