Educación de la primera infancia
Se aproxima el período de inscripción en los jardines de infantes y hay varias recomendaciones para tener en cuenta al momento de elegir la institución. La multiplicidad de formatos familiares y los vínculos con el jardín
Por María Cecilia Gotta
Redacción
Próximo a comenzar el periodo de inscripción en todos los jardines de infantes, vale tener en cuenta algunas recomendaciones para luego poder elegir con criterio la institución. Son muchos los nervios y la ansiedad que genera esta etapa tanto en los padres como en los niños, pero lo más importante es conocer el proyecto institucional, valorar el primer contacto que se genera con el jardín, que sea un lugar seguro, organizado, cálido, además que el personal esté capacitado, pudiéndose forjar vínculos entre la familia y la institución.
La educación de la primera infancia puede ser una herramienta clave de la integración y la inclusión social. Desde el primer momento, esperamos que los niños vayan construyendo la idea de que el jardín puede ofrecerles una experiencia formativa interesante y desafiante, que los va a incluir a todos, que les abrirá la puerta de nuevos conocimientos y la posibilidad de integrarse al mundo desde sus deseos, intereses y posibilidades.
En nuestro distrito está la posibilidad de incluir niños entre los 2 y 5 años, cumplidos al 30 de junio de 2020. El período de inscripción según el calendario de actividades docentes se extenderá desde el 11 al 15 de noviembre próximos, donde los directivos solicitan DNI de los niños, de los padres y/o responsables, partida de nacimiento y certificados de vacunación y/o libreta sanitaria.
La inspectora de nivel Inicial, Patricia Rodríguez, detalló cual es la oferta educativa detallando que hay salas de 2 años en los Jardines de Infantes Nº 903, en ambos turnos; en el Nº 914, turno tarde y Nº 909, turno mañana.
También en todas las localidades del interior como La Dulce, Claraz, Juan N Fernández, Ramón Santamarina, Energía y los Jardines de Infantes Rurales de Matrícula Mínina en el Balneario Los Ángeles, Paraje La Lita, La luisa y Villa Zabala.
A su vez se inscribirá a los niños que ingresan al segundo ciclo el nivel inicial, comprendidos entre 3 y 5 años, teniendo prioridad los que se encuentran en edades obligatorias, 4 y 5 años.
La inspectora señaló que por lo general las familias eligen los jardines de infantes próximos al domicilio, pero aclaró que el ingreso no es por orden de llegada, sí dentro de los días pautados, aunque en todos los establecimientos se continúan realizando inscripciones fuera de término.
Asimismo destacó la importancia de esta trayectoria educativa de los niños. “Las salas se constituyen como espacio de encuentro donde la mera tolerancia puede dar lugar a la valoración de las diferencias y a la construcción de proyectos comunes. Enseñar es reconocer al otro como sujeto capaz de aprender, de pensar, de dialogar y de producir. Esta es la función primordial de los jardines de infantes”, señaló Rodríguez.
Vale mencionar que actualmente existe un programa que se denomina “Mis alumnos”, donde los niños están matriculados digitalmente en los jardines, garantizando que estén incluidos en el sistema educativo.
De esta forma, se han agilizado los trámites administrativos en las instituciones.
Marcela Di Rocco, directora del Jardín de Infantes Nº 901, opinó que “es una herramienta que nos llevó su tiempo apropiarnos pero tenemos toda la matricula cargada y nos permite hacer un seguimiento y trayectoria del alumno, trabajar en red, y al mismo tiempo que no ingrese el mismo alumno a dos jardines en el mismo momento”.
Aunque señaló que una manera de ayudar a las instituciones educativas es que las familias avisen donde inscribieron a su hijo y asi poder conocer cuál es su preferencia.
Con el programa se puede rastrear a los niños que por ejemplo han venido de otras ciudades y que ahora están radicados en nuestra ciudad.
“Asi podemos contactarnos con las directoras de los jardines y nos cuentan la historia de ese niño y esa familia. Los niños ya no son un número, podemos conocer mejor sus historias y colaborar para que esa trayectoria sea más efectiva”, dijo Di Rocco.
Vínculos
Al jardín ingresan multiplicidad de formatos familiares, mamás solas que crían a sus hijos, padres separados, familias numerosas, madres que están solas y no cuentan con un sostén familiar, parejas que tienen hijos con capacidades diferentes, familias ensambladas y muchos otros modelos más, sin embargo, para todos la primera experiencia en el jardín consiste en que sus hijos traspasan las cuatro paredes de la casa e ingresan a un espacio nuevo y totalmente distinto.
También se dan dos situaciones, las familias que pueden elegir y las que no. Es decir, algunos tienen la posibilidad de optar por un jardín que les gusta y otros a veces por cuestiones laborales o por cercanía, tienen que mandar a sus hijos a un jardín que no es el elegido por ellos, pero se presenta como el único posible.
Al transitar ambas realidades, el jardín debe ponerse en el lugar del otro y fortalecer el vínculo de confianza, expectativa y conversar para crear esa confianza con las familias que no los eligieron.
“Hay que poder transmitir y construir un clima de confianza y eso es fundamental. Los padres que mandan a sus hijos a un lugar donde está confiado y seguro, es un niño que va a tener un tránsito más efectivo en la integración al jardín”, afirmó Di Rocco.
En este mismo sentido, María Angélica Prado, directora del Jardín Municipal Maternal Acuario, detalló que generalmente en diciembre se hace una reunión con los padres nuevos que son los que se suman por primera vez.
“Por un lado para calmar ansiedades, para que conozcan a las maestras, el jardín y en esas primeras reuniones las docentes ponen en palabras lo que trabajamos de la ESI, para que tengan una idea clara”, afirmó.
Por lo general cuando se explican los objetivos y los proyectos, ayuda a consolidar este vínculo entre la familia y el jardín, sabiendo que cuando uno ingresa por primera vez tiene dudas y en ese momento los docentes tienen que estar bien preparados para dar respuestas.
Más allá del proyecto institucional, también vale la intuición personal de cada mamá, cada papá o adulto responsable de ese niño que elige la institución.
El primer contacto es fundamental y que sea un lugar seguro, organizado, cálido, que el personal esté capacitado para trabajar con los pequeños, que tengan su título y ver si la institución se preocupa por forjar el vínculo con las familias.
También es muy importante cuando una familia se acerca a la institución, eligiéndolos, lo cual es un halago. A veces se elige el jardín porque ya fueron los hermanos o también por la cercanía, porque han sido recomendados por otras familias, por lo que se enseña, etc.
En este último punto, es importante que las familias pregunten acerca de la propuesta pedagógica y también es bueno que lo destaquen las autoridades del jardín.
Al mismo tiempo, es fundamental no quedarse con dudas. Para ello se puede pedir permiso para conocerlo, recorrerlo y que los jardines abran sus puertas en este sentido.
Es bueno que los padres pregunten cómo se trabaja, hagan preguntas del horario, la organización e inclusive no tienen que ir solo el día de la inscripción, sino que pueden ir en la semana previa y manifestar que están interesados en que ingrese su hijo en el jardín y quieren conocerlo.
Propuesta educativa
La función del jardín no es remplazar a la familia, sino que es un complemento con la propuesta educativa, siendo fundamental que haya un trabajo en equipo de ambas partes, entendiendo que es una etapa de crecimiento y aprendizaje para los niños y los adultos.
Angélica Prado, en este sentido, puntualizó que “nuestro proyecto institucional más fuerte y generalmente se da en todos los maternales es vinculado a la salud. Brindando charlas informativas abiertas a la comunidad sobre accidentes domésticos, primeros auxilios, el cuidado del cuerpo, respeto del cuerpo hacia uno y hacia los otros, sobre temas de prevención y reforzando en ellos hábitos de buena salud, comida saludable, etc”.
Sin embargo, la directora del Acuario, el cual depende del municipio, más allá de que es una institución educativa donde se trabajan propuestas pedagógicas y proyectos institucionales, el objetivo principal es que los niños concurran en el horario que las mamás están trabajando.
Inclusive cubren algunas necesidades de algunos menores que se les vulneran los derechos, siendo derivados de los caps, de los centros de estimulación, de políticas de género, etc.
Además aclaró que hace bastante tiempo vienen trabajando desde la sala de 2, dejando los estereotipos de lado, teniendo los niños total libertad para poder jugar con lo que quieran.
Demanda de sala de 2 años
La demanda de sala de 2 años, es otra realidad en el distrito, y es un pedido muy fuerte de la comunidad, ya que la mayoría de las familias salen todos a trabajar y la apertura de salitas de dos, son una verdadera solución para muchos hogares.
Al respecto, Marcela Di Rocco dejó entrever la posibilidad de que se abra una salita de 2. “Nosotros tenemos una matrícula de 280 alumnos, de los cuales egresan 100, contando con diez secciones y tenemos una casa contigua al jardín que queremos reflotarla y abrir una sala de 2, pero nos resta lo económico para poder encaminar la obra”, manifestó.
Pero para las edades obligatorias de 4 y 5 años, hacen todos los esfuerzos necesarios para que ningún niño quede sin escolarización, haciendo redes con otros jardines.
En tanto, desde los jardines municipales, si bien se les da prioridad a los hijos de
los empleados municipales, del 12 al 15 de noviembre, se abrirá la inscripción al resto de la comunidad.
Las matriculas que manejan los jardines maternales municipales, pueden variar de un año a otro, pero generalmente son muy pocos los chicos que dejan de asistir, salvo porque se van a vivir a otra ciudad, o por otras cuestiones familiares.
Vale recordar que el Acuario y el Evita no tienen la extensión horaria, en cambio si cuentan con este servicio para las familias de empleados municipales, el Jardín Barquito de Papel y el Pichi Huinca.