Así vivía un argentino la espera del temporal en Miami
Un argentino que se encuentra viviendo en Miami hasta fin de año nos envía videos mientras espera la llegada del huracán Irma. Se encuentra viviendo en un octavo piso frente al mar y no quedó prácticamente nadie en el edificio ya que escaparon por el alerta meteorológico.
El huracán Irma acumuló 19 muertos y continuó golpeando las costas del Caribe, esta vez en Cuba, Haití, República Dominicana y las Bahamas. El ciclón, que llegó a ser registrado con la mayor intensidad de la historia, perdió fuerza a su paso y el Centro Nacional de Huracanes norteamericano lo rebajó a categoría 4 de Saffir-Simpson, aunque alertó que sigue siendo “extremadamente peligroso”. Con vientos de 265 kilómetros por hora, ahora Irma sigue su trayecto hacia Estados Unidos, donde se calcula que más de 725.000 personas evacuan sus casas en el estado de Florida. Luego del paso de Irma, otros dos ciclones mantienen en vilo al Caribe: el huracán José, también registrado en la categoría 4, llegará a las Antillas orientales, devastadas por el paso de Irma, mientras que la costa atlántica de México espera, esta madrugada, por el ciclón Katia.
Irma no detiene su paso. Luego de causar 19 muertos y afectar a más de un millón de personas, cuando vientos de casi 300 kilómetros por hora que arrasaron gran parte de las Antillas orientales y Puerto Rico, el ojo del ciclón, que pasó de grado cinco de intensidad a cuatro, pasó por el norte del Caribe. En la madrugada de ayer, el huracán llegó a Haití y República Dominicana, sin registrar víctimas fatales, pero con centenares de casas destruidas y problemas en todos los servicios básicos. “Si Irma hubiese tendido un recorrido más al sur de la isla, se habría producido una catástrofe”, comentó el especialista meteorológico, Martin van der Locht. Horas después, mientras la tormenta continuaba en Haití, las ráfagas de viento se hicieron sentir más al norte del Caribe, específicamente en la costa este de Cuba. En total, más de 200.000 cubanos fueron evacuados o autoevacuados a casa de familiares o refugios oficiales de la isla, de acuerdo a los datos de Defensa Civil.