“Es notable el crecimiento de la construcción”
Sostuvo el agrimensor Leandro Laguilón, quien brindó una mirada sobre la realidad de Necochea y puntualizó en algunos temas candentes que generan polémica entre los habitantes.
Leandro Laguilón tiene 44 años, esposa y dos hijos de 6 y 17 años. Estudió en la Facultad de La Plata y se recibió como agrimensor en el 2006. Tuvo una primera y favorable experiencia laboral de cuatro años en Buenos Aires y luego decidió radicarse en su tierra natal para desempeñarse en lo profesional y formar una familia.
La propuesta de brindar su postura acerca de diversos asuntos del quehacer histórico y diario de la ciudad, permitió ahondar en el crecimiento de la construcción, la realidad del Parque Miguel Lillo y del complejo casino, la necesidad de contar con un nuevo puente y también mencionar como mirada positiva, la creación hace un par de años, de un espacio de entretenimiento en el área portuaria.
-¿Cómo la vez a la ciudad en este momento?
-Por mi actividad profesional, estoy muy asociado al crecimiento de Necochea en la parte constructiva, porque en lo previo al inicio de una obra, los agrimensores debemos trabajar y estamos en contacto con la expansión.
La mayor demanda que tenemos se encuentra en el radio comprendido entre calle 50 y la avenida 10, desde avenida 91 hasta la Villa Zabala, donde hay un notable crecimiento de las construcciones, también en sectores aledaños al río Quequén y otros lugares como la propia ciudad de Quequén.
Esto se puede confirmar al mirar las imágenes satelitales. Con la etapa del Plan Procrear se avanzó bastante, porque dio un puntapié inicial para que muchos jóvenes se animen a tomar un crédito y construir sus hogares para luego poder terminarlos.
Laguilón es hijo de Miguel Laguilón, un conocido comerciante que tuvo su carnicería durante años en la esquina de avenida 59 y calle 40. Su madre Griselda, también impulsora del crecimiento familiar.
“Desarrollo actividades de manera independiente, realizo agrimensura y topografía junto a mis socios Sebastián Polizzi y Soledad Laiolo. Hacemos planos, mediciones, reuniones en tareas de agrimensura y topografía”, manifestó el profesional.
Reconoció que “trabajamos para la Municipalidad, el Consorcio de Gestión del Puerto de Quequén, entidades y empresas vinculadas a la actividad agroexportadora y que dan servicios a la estación marítima”.
Un tema sensible
-¿Qué opinión te merece la realidad del Parque Lillo?
-Es un tema muy sensible y hay que expresarse con cuidado, respeto las manifestaciones de todos pero me parece valioso que se hiciese una intervención con criterio, con áreas de servicios generadas y del mismo mantenimiento del pulmón verde.
Hoy se parece más a un bosque en algunos sectores, pero es solamente una opinión, conozco gente que integra el grupo de ambientalistas y no me interesa generarme trabajo a través del Parque Lillo, ni quiero chocar con estas personas que defienden asu posición en relación al parque.
-Vos consideras que podrían generarse recursos para ser volcados luego en el mismo Parque Lillo.
-Entiendo en que habría que dotar al Parque Lillo de áreas de servicios para que sean aprovechadas por las personas que nos visitan y residentes, en aquellos días en que las condiciones meteorológicas para la playa no sean las mejores.
Creo que sería una buena alternativa sostener a esa gente entretenida en el Parque Lillo con diversas propuestas y que no sólo tenga la chance de tomar mates en la avenida 10. He estado varias veces en la localidad de Carilo y le ha dado importancia al turismo como también sucede en Villa Ventana (Partido de Tornquist), los dirigentes han sabido explotar estos lugares.
“La postal” deteriorada
-¿Cuál es tu posición en referencia al complejo casino y su estructura?
-Me da mucha pena su realidad actual, tengo recuerdos de pasar noches en la zona del bar, el restaurante, el área del bowling, la pista de patinaje que alcancé a conocerla… Y ver esta postal de ahora es tremendo para la ciudad y es un tema muy complejo para resolverlo de un día para el otro.
-En ese sentido, ¿consideras que se necesitarían políticas de Estado para sacarlo a flote?
-Y pienso que sí. Es fundamental la intervención de la Provincia de Buenos Aires y la Nación para revertir esta situación. No le podemos pedir a la Municipalidad que lo sostenga, es una locura pretender eso.
Aclaro que nunca hice política ni me involucré o le puse demasiada atención, pero entiendo que el alcance que pueda tener la comuna es muy escaso para hacer semejante obra que hay que desarrollar.
Desde el municipio apenas se pueden reparar las calles, mantener en condiciones los hospitales, sostener los salarios de los trabajadores y no hay manera de poder mejorarlos, aunque debe manifestar que veo en condiciones más favorables al desempeño del municipio en estos momentos.
Un nuevo puente
El agrimensor Leandro Laguilón también se pronunció por una necesidad que tiene el núcleo urbano Necochea-Quequén y que se trata de una deuda pendiente desde hace años de la dirigencia política: la construcción de un nuevo puente.
“Una obra que me parece sería muy interesante por lo que le brindaría a la ciudad es la realización de un puente en la continuidad de la denominada avenida de las torres (la 542) y cualquier conductor de vehículos llegaría de forma directa a la avenida 59, a la altura de la calle 16 ó 18, sin tener que hacer tantos desplazamientos por Quequén”, enfatizó.
El profesional aclaró que si “bien se trata un proyecto muy complicado la ejecución de un nuevo puente, hay otros temas a considerar en la ciudad porque existen falencias en el sistema de salud y lo opino como ciudadano”.
Añadió que “todo recae sobre los hospitales municipales y cuando uno mismo necesita una urgencia en Pediatría, por ejemplo, la guardia del Hospital Municipal es el único lugar donde recurrir”.
Laguilón sostuvo que “mi perspectiva es bastante positiva a lo que veníamos acostumbrados hasta hace unos años. Si bien transitamos a paso lento, avanzamos positivamente y la intervención que se hizo en la zona portuaria con Puerto Gardella es muy buena. Lleva mucha gente, entretiene y genera puestos de trabajo”. ////
Una carga muy pesada
“Necochea carga un peso grande en su contra, que fue haberse loteado indiscriminadamente en los años 50-60 generando cientos de lotes y con un gasto inmenso para el municipio en brindar los servicios esenciales”, explicó el agrimensor Leandro Laguilón en otro tramo de la charla mantenida.
-¿Esto se dio por la falta de controles en su momento?
-Cualquier ciudad de la Provincia fue creciendo según su necesidad y controladamente. Sostengo que fue un grave error que se paga muy caro. No hay planeamiento que lo soporte. A raíz de esto y después de tantos años, se generen inconvenientes en la regulación dominial, muchos terrenos no están aptos para la venta, profundizando el crecimiento de sectores aislados.
Y me refiero todo lo que es la zona del barrio Villa Zabala, Villa Florida, macizos frente a la Villa Díaz Vélez, etcétera. ///