“Hallamos la camioneta cerca de la cancha de Mataderos”
Manifestó Gonzalo Vargas, el damnificado, quien junto a su hermano, Rodrigo, recorrieron la ciudad el domingo a la noche
“Por suerte, encontramos la camioneta sin faltantes, cerca de la cancha de fútbol de Mataderos, en calles 41 y 86. Le di arranque al motor con otra llave que tenía y volvimos a casa con mi hermano”, sostuvo anoche Gonzalo Vargas.
El piloto de automovilismo zonal agradeció la colaboración de su hermano Rodrigo y de los varios amigos que al enterarse del robo de la camioneta del frente de su domicilio, salieron a la calle a buscar el rodado.
“En plena lluvia torrencial del domingo, alrededor de las 22.30, recuperamos la camioneta y debo agradecer a todos quienes ayudaron para que esto ocurra”, reconoció Vargas durante el diálogo mantenido con Ecos Diarios.
Se trata de una camioneta marca Chevrolet S-10 de color gris, que fue sustraída frente a un domicilio de calles 57 y 50, de nuestro medio, mientras el joven se estaba bañando y escuchó el ruido del motor de su vehículo.
Con audacia
Gonzalo Vargas junto a su padre, Antonio, piloto del automovilismo zonal durante años, y su hermano Rodrigo, una vez que se tomó conocimiento de lo sucedido, salieron a recorrer los distintos sectores alejados de la ciudad.
“Fuimos hacia el predio de la Sociedad Rural y aledaños, luego, mis hijos continuaron por calle 86 en dirección al Río Quequén, y detrás de la cancha de fútbol de Mataderos, se encontraron con la camioneta y sin ocupantes en ese momento”, narró ayer Antonio Vargas.
El hecho fue caratulado como “hurto agravado de vehículo dejado en la vía pública” y “hallazgo”, con intervención de la Fiscalía de turno.
Sin novedades
El que todavía no ha tenido la fortuna de recuperar su camioneta también Chevrolet S-10, es el transportista Rubén Arias, quien fue víctima de la sustracción del rodado en la zona de calle 68 entre 63 y 65, en el radio céntrico.
El ilícito se produjo en horas de la madrugada del pasado jueves y horas después de ese hecho, otro episodio de similares características le ocurrió a Gonzalo Vargas, también en jurisdicción de la Comisaría Primera. ///