La ayuda de Cáritas no sólo se centra en los alimentos y en la ropa sino en la escucha
Manifestaron que en el marco de la pandemia se nota que la gente necesita ser contenida y contar sus historias
Cáritas desarrolla un trabajo constante con las familias más necesitadas de Necochea y Quequén y se reforzó aún más con la pandemia, pero además de entregarles, ropa, calzado y alimentos, han notado que quienes concurren necesitan una contención que va más allá de lo material como es la contención y la escucha. La gente necesita hablar y contar su historia, sus pérdidas personales.
La hermana Lucía quien está al frente de Cáritas en Quequén señaló que “mucha gente no necesita ni alimentos ni ropa sino venir y comunicarse, contar su situación, ser escuchados”, y añadió “hay que dedicarles tiempo, escucharlos atentamente porque recién ahí muchas veces uno entiende lo que realmente necesita esa persona y algunos les cuesta decirlo pero con paciencia se descubre lo que necesita”.
Inclusive hay mucha gente que está viviendo momentos feos o situaciones muy difíciles y necesitan que alguien los escuche y los atienda.
Al respecto, Lucía aseguró que algunos se acercan con mucha timidez, pero con el tiempo van esbozando una sonrisa y van tomando confianza.
Lucía está en Cáritas Itatí y Barrio Estación Quequén, pero igual reciben gente desde otros sectores de la ciudad y afirmó que “todos los días tocan timbre preguntando si tenemos algo para ayudarlos, es decir, hay gente que no puede esperar y pasan y preguntan y uno trata de que no se vayan con las manos vacías porque tienen criaturas”.
Si bien el trabajo ha aumentado, desde Cáritas lo hacen con mucho gusto y señalan “gracias a Dios podemos atender a todos por las donaciones que recibimos de alimentos, leche, papas, entre otros productos. Hay mucha gente solidaria”.
Otra de las realidades es que también hay gente con necesidad de ayudar a los demás y acercan alimentos, calzados, elementos que pueden servir, como por ejemplo barbijos.
La Hermana Lucía también consideró que las donaciones que reciben es porque “la solidaridad llega al destinatario y todo se entrega a las familias necesitadas”.
Entre Cáritas Itatí y Barrio Estación Quequén brindan ayuda a 265 familias, a las cuales conocen y este número fluctúa porque hay veces que algunos mejoran su situación económica y dejan de venir o solo se acercan por la ropa y se suman otros, todo en un marco de estricto protocolo.
Colaboración
En Necochea también se trabaja arduamente y ayer, desde la sede de Cáritas Santa María del Carmen, ubicada en calle 55 casi 62, se realizó la entrega de bolsones de alimentos.
Todos los meses ayudan a más de 200 familias, las cuales se acercan con turno por orden alfabético dos veces al mes, en el marco de un operativo de entrega con un protocolo de higiene, con uso de barbijo, guantes, alcohol en gel y distanciamiento.
Desde esta Cáritas han notado que cada vez son más las familias de la colectividad boliviana que se han acercado, aunque no todos tienen las mismas necesidades.
Rosana Gaspari desde Cáritas, señaló que en cada bolsa hay ocho alimentos, además de rollo de papel o lavandina que entrega Desarrollo Social del municipio, con quienes trabajan mancomunadamente.
Además señaló que “los costos de los alimentos para tantas familias es costoso y trabajamos muy duro los pocos voluntarios que somos”.
Inclusive algunos bolsones los llevan a domicilio a aquellas personas mayores de edad, que por razones de fuerza mayor no se pueden mover de sus casas.
El bolsón cuenta con alimentos no perecederos, como aceite, puré de tomates, polenta, leche larga vida o en polvo, azúcar, fideos, yerba o te, pan de jabón, etc, todo depende de los productos que haya.
En este momento desde esta Cáritas señalaron que luego de los días de intensa lluvia, hay muchas familias carenciadas que necesitan camperas para niños y adultos además de frazadas y colchones.
La feria americana de ropa y calzado la realizan cada quince días para juntar fondos y comprar así algún alimento. Aquellas personas que se quieran sumar al voluntariado pueden acercarse a la sede de Cáritas o a la secretaría parroquial de Santa María del Carmen.///