La baja en la tasa de natalidad y los cambios culturales de una sociedad
Las conformación de las familias ya no son como se pensaban antes, con un modelo ideal impuesto desde antaño. El rol de la mujer, el crecimiento profesional en las parejas y las elecciones sexuales son algunos de los fundamentos que podríamos encontrar ante esto.
Mandatos y costumbres, esos que nos han perseguido durante una buena parte de nuestras vidas. Estudiar, recibirse, formar una familia tipo (hombre, mujer y dos hijos), una casa y un auto. Ahí se nos planteaba el modelo ideal de vida, sin mucho más sueños, ni que hablar de ambiciones.
La llegada de un mundo globalizado llevó a que en la Argentina, desde hace tiempo, estos mandatos ya no sean “universales”, sino que existen personas, comunidades con otro tipo de miradas, con otros valores, concepciones diferentes y hasta con otro tipo de orientación sexual, que ha produjeron cambios en nuestra sociedad.
Según revelaron estudios analizados por Unicef, Unfpa y Cippec, la tasa de fecundidad en Argentina se redujo un 34% entre 2014 y 2021 y aún más en niños y adolescentes donde la cifra se redujo en un 59%. Los especialistas adjudicaron las variaciones a la "disminución de embarazos no intencionales, cambios en las conductas sociales, el acceso a la anticoncepción y el auge de los movimientos feministas que motorizaron la ampliación del acceso a derechos sexuales y reproductivos".
Fue a mediados de la época del 70 donde la Argentina tuvo niveles elevados de nacimientos. Este hecho coincide -según el análisis- "con un periodo de implementación de políticas pronatalistas vigentes entre 1974 y principios de los 80", pero a partir de la década de los 90, la tasa de fecundidad retomó su descenso a un ritmo suave.
Según un informe que revela el diario ámbito financiero, a partir de 2014, la evolución de las tasas cambió significativamente: en Argentina bajó un 34% entre 2014 y 2020, descenso que fue el más pronunciado desde que existen registros anuales de esta variable.

“Faltan políticas públicas que acompañen a las mujeres”
Lucía Marcenac es socióloga, recibida en la Universidad de Buenos Aires, y sobre el tema de la baja de la natalidad Argentina argumentó que puede deberse a varios factores. “Tratándose de un fenómeno social como es este,, es difícil de pensar en una sola causa, porque son fenómenos complejos y es necesario estudiar y analizar en profundidad para poder explicar”, expresó la profesional, quien a su vez aseguró que “hay una mayor planificación a la decisión de tener hijos y creo que también un punto muy importante tiene que ver con la llegada de la Educación Sexual Integral (ESI) a las escuelas, porque la mayor cantidad de baja se dio en el sector de los adolescentes, donde fue bastante significativa”.
Para la integrante de la Asociación Civil “Alfredo Marcenac” una de las mayores problemáticas que se dan tienen que ver con el hecho de que las mujeres tienen otra posición en la sociedad. “Uno de los puntos claves tiene que ver con la distribución de las tareas de cuidados, donde culturalmente en su gran mayoría recaen sobre las mujeres que en hoy están saliendo al mercado del trabajo, no solo por elección sino también por necesidad y esto en algunos casos deja postergado la decisión de ser mamá”.
Recalcando sobre lo dicho en el párrafo anterior Lucía afirma que “hoy tenemos una escasez desde lo público para el cuidado de niños y niñas, porque sí una mamá quisiera encontrar un lugar para que su hijo o hija vaya, se le dificultaría muchísimo. Faltan políticas públicas que ayuden a las mujeres que quieran ser mamás, porque como vuelvo a repetir no solo es una cuestión de desarrollo profesional, sino además una necesidad, porque ya con un solo sueldo en una familia no alcanza”.

La incidencia de la ESI
Una de las principales variaciones que afectaron las tasas de natalidad y fecundidad en los últimos años fueron los cambios vinculados a derechos sexuales y reproductivos.
“La difusión de información en medios de comunicación y redes sociales sobre temas de la igualdad de géneros, las consecuencias del embarazo no intencional, alternativas de vida alejadas de los estereotipos de género y la relevancia de la educación sexual integral podrían haber tenido un impacto relevante sobre las preferencias de muchas mujeres adultas, jóvenes y adolescentes”, dice un informe realizado por Unicef.
Además la sanción de Ley 26.150, un triunfo de la ola verde, dio inicio al Programa Nacional de Educación Sexual Integral (ESI), y el Plan Nacional de Prevención del Embarazo No Intencional en la Adolescencia (ENIA), mejoraron las condiciones de acceso de adolescentes al sistema de salud. El trabajo destacó la aprobación de la Ley de Interrupción Voluntario del Embarazo (IVE) en 2021, cuando el Estado nacional incrementó con respecto al año anterior casi un 400% la distribución de misoprostol.
La elección sexual y un nuevo Mundo, llevó a que un montón de personas disfruten libremente de su orientación sexual, de la practica del sexo sin tabú, sin tener que ser solamente con fines reproductivos. Aquí también tuvo mucho que ver la ESI y todo lo que la globalización les ofrecen no solamente a los jóvenes, sino a adultos mayores que han decidido empezar a disfrutar “plenamente” de sus vidas, sin ataduras culturales algunas.
Los nacimientos en Necochea
Un informe realizado por Ecos Diarios, por el periodista Juan José Flores, contó que el descenso de la natalidad en la ciudad en los últimos 17 años es contundente. En 2005, se registraron 1.514 nacimientos, 804 en el hospital, 539 en la clínica Cruz Azul y 171 en la hoy cerrada clínica Regional. En 2006, en tanto, ascendió a 1563 nacimientos (798 en el hospital y 611 y 154 en las clínicas). Un promedio de 126 y 130 anotados por mes, que contrasta notablemente con el actual.
Siempre de acuerdo a los relevamientos que ha venido realizando este medio, en 2017, aún se mantenía el promedio anual de nacimientos en nuestra ciudad, oscilando entre 1.400 y 1.580 alumbramientos por año. En 2017 se habían registrado hasta diciembre 748 nacimientos en el hospital, mientras que en la Clínica Cruz Azul hubo unos 600 alumbramientos.
Pero el descenso desde entonces es sostenido. En 2018 se anotaron 1.282 bebes (706 en el hospital y 576 en la clínica Cruz Azul) y en 2019 fueron 1142 (645 en el hospital y 497 en la clínica). Una reducción entre 11% y el 7% interanual.
Cuando se habla de baja en la tasa de natalidad muchas veces lo vemos como algo negativo, pero no siempre es así, porque como explicó Lucía Marcenac es un fenómeno social multicausal. Se debe ver el todo para terminar de sentenciar, aunque a la vista de todos hay un cambio muy claro culturalmente, y eso sin lugar a dudas ha tenido que ver y mucho.///
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