“La Bancaria es un sindicato vanguardista con políticas de inclusión y de más derechos”
Demian Ledesma, secretario general de la entidad, le atribuyó a Palazzo estas conquistas
En la presente actualidad los trabajadores bancarios pasan por un buen momento, donde han sido de los pocos sectores que han venido firmando paritarias por encima de la inflación, como así también accediendo a mejores condiciones laborales. Todo esto no es casualidad, sino una causalidad para Demian Ledesma, actual secretario general de La Bancaria en nuestra ciudad, y remite a la llegada de Sergio Palazzo, secretario general nacional.
“Cuando entré al banco en el año 1993, tenía 24 años y se había dado una política de contratación, debido a que se habían realizado varios retiros voluntarios en el contexto del gobierno de Carlos Saúl Menem”, dijo el hombre nacido en Buenos Aires, quien además contó: “Vengo de familia bancaria, ya que mi viejo fue bancario y mi abuelo también. Lo interesante es que los contextos de cada uno de nosotros fueron diferentes”.
Sobre lo dicho en el párrafo anterior, aquella épocas de los 90´, Ledesma recuerda diciendo “a mí me tocó la época del menemismo, donde eran salarios bajos, no existía la paritaria, donde además era muy difícil expresar algún descontento dentro de la estructura sindical, que además era muy complaciente al gobierno de turno de aquel momento”. Quien manejaba los destinos del sindicato de trabajadores bancarios en aquel momento fue Juan José Zanola, una figura con pocos buenos recuerdos para el actual dirigente local.
Luego de su ingreso en la actividad bancaria, Ledesma le toca asumir un rol bastante nómade y se instala primeramente en Mendoza, donde allí conocería a Sergio Palazzo, para luego seguir recorriendo el país durante cinco años, hasta que se produjo un quiebre con la llegada de su primer hijo León y acota diciendo “es la cuarta generación Ledesma que trabaja en el banco”. No hace falta describir el orgullo con el cuál lo dice.
Luego de volver a instalarse en Buenos Aires, en el barrio de Barracas, y de pedir el traslado a la sucursal más cercana a su casa, la actividad sindical dijo presente, aunque no sería allí su futuro, sino en aquella ciudad que lo había cobijado en las vacaciones de verano, como fue Necochea.
“Lo paradójico es que me costó adaptarme a la ciudad, nuevamente, pero retomo otra vez la actividad sindical, me reencuentro con mis compañeros de base donde se habían incorporado a la estructura sindical”, acotó.
La Bancaria Necochea
La salida de la metrópolis, buscando nuevos aires, hizo que en el 2006 la familia Ledesma desembarca en Costa Bonita, lejos de aquellos ruidos y el constante frenesí que propone la Capital Federal. Claro que no fue tan fácil, porque el mismo Demian Ledesma lo cuenta: “Tuvimos que hacer el período de adaptación, donde nos tuvimos que acostumbrar a una nueva cultura”.
Instalados ya en ese sector de Quequén, su activismo político floreció rápidamente, y sería un paso para lo que vendría en el sindicato de los bancarios: “En la pequeña comunidad que habíamos elegido para vivir veíamos que tenía dificultades y que la participación era la única manera de contribuir a la mejora de todos nosotros. Entonces armamos una junta vecinal, donde empezamos a convocarlos, yendo casa por casa, juntando firmas y teniendo reuniones con la delegación de Quequén. Muchos de mis amigos de hoy día son de aquella gestión donde pedíamos que se garantizara que hubiera luz, que el camino esté transitable, que la policía cumpliera con su función, que la basura sea recolectada”, relata quien también ocupa la secretaría general de la CGT.
Ya en el 2009 se mudó definitivamente, a Necochea, se compró su casa a través del banco, la cual hoy está pagando, ya que los empleados bancarios tienen acceso a préstamos hipotecarios.
El año 2010 fue revulsivo para Demian Ledesma. Primero, por la llegada de segundo hijo, y segundo porque emerge la figura de Sergio Palazzo. “Estando en Mendoza pude ver el trabajo que hacía, porque estaba a cargo de la seccional, donde había admirado y reconocido a ese hombre, el esfuerzo que realizaba en la defensa de los trabajadores del Banco de Mendoza, que había sido incorporado por el Banco Nación y corrían riesgos de despedidos los compañeros de allí y, además una serie de situaciones que se estaban dando bastante enojosas, como fue la participación de un grupo empresario político - económico, partícipes necesarios del vaciamiento de la banca mendocina”, recuerda el empleado del Banco Nación de nuestra ciudad, hoy ejerciendo la actividad sindical.
Los vínculos con esta nueva estructura sindical, que estaba tomando cuerpo alrededor de la figura de Palazzo, pero además que muchos de sus amigos que en su momento habían compartido la militancia de base contra el menemismo, tenían lugares de conducción. “Lo que termina pasando es que se me pide transmitir esta idea y nuevo concepto. Así es como me incorporo como secretario de actas del sindicato de La Bancaria”
Fue un trabajo de hormiga el que se realizó por estos lados, como bien lo explica quien representa a los trabajadores y trabajadoras bancarios. “De a poquito empezamos a incorporar algunas cuestiones que se estaban dando a nivel nacional, como convocar a la afiliación a los compañeros que estaban trabajando en la banca privada, que hasta el momento no habían sido tenidos en cuenta, como también tratar de visibilizar la seccional dentro de la Provincia y la Nación, participando de actividades significativas como marchas y acciones gremiales u otras que son recreativas, culturales y deportivas, como por ejemplo las olimpiadas de profesionales”.
La llegada a la conducción lo da como un “hecho natural”, ya que “hubo un proceso de recambio generacional, y ahí ingresamos a la actual conducción con: Daniel Tomalino, mi histórico compañero de fórmula de toda la vida, trabajador del Banco Provincia, Mario Anchorena, con Cesar Cordich, y con compañeros y compañeras de distintas entidades como Fernández Arévalo y Alejandro Natali, por citar algunos”, relata Ledesma.
Claro que el empuje para haberse presentado no fue un hecho aislado, con Palazzo a nivel nacional “creíamos que a nivel local se debía tener una representación de eso nuevo, donde además en Necochea había una estructura antigua, que todavía se resistían, pero claramente se renovó”.
Un sindicato vanguardista
El cambio de época, la salida Carlos Menem de la Presidencia, la llegada de nuevas figuras políticas y con ello otro tipo de ideas fue un antes y un después dentro de la estructura sindical. “La Bancaria es un sindicato vanguardista, con ampliación de derechos, con incorporación de políticas estatutarias de derechos para colectivos históricamente postergados, como el tema género y el cupo laboral trans, políticas verdaderamente inclusivas, donde se han efectuado leyes y reformas de estatuto que permitirán garantizar la seguridad de todas y todos los trabajadores de la actividad bancaria”. Todo esto para Demian Ledesma tuvo una consecuencia más importante, y que termina siendo un orgullo para los dirigentes de La Bancaria. “Hoy es uno de los sindicatos que más consolidados está y que mejor salario perciben”.
“El próximo paso que tuvimos acá fue la normalización de la CGT y luego hubo un renunciamiento colectivo de los compañeros del sindicato de camioneros en cada una de las regionales de la CGT y asumimos la posta nosotros con Alberto Peralta. Este año volvimos a renovar la conducción, incorporamos nuevos sindicatos, y compartimos la conducción con el compañero Peralta”, culminó.///
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