El 26 de agosto de 2023 se producía un impactante incendio en la cochera de la Gran Galería Central que dejaba como saldo importantes daños materiales y  que cambiaría para siempre la dinámica del lugar. 

Al cumplirse el primer aniversario de este acontecimiento bisagra para la vida de muchas familias que perdieron sus fuentes de ingresos, la Gran Galería Central persiste en su lucha por seguir siendo parte del día a día de los necochenses. 

Poca gente

“Hace 18 años que estoy acá, la Galería es mi segundo hogar. Yo acá pude hacer mi clientela y en su momento vendí muy bien, ya que era un espacio muy transitado y visitado por la gente”, señaló Susana Fiadone, comerciante del rubro de accesorios.

Agregó: “Antes de que pase el incendio, la Galería estaba llena y hermosa. Justo se había hecho la fiesta del 60 aniversario y junto con los otros comerciantes habíamos organizado un montón de cosas y luego pasó esto y cambió todo”.

Reconoció que “la venta está bajísima, la gente, directamente, no entra a comprar porque piensa que es peligroso o no saben que hay locales que ya están funcionando con normalidad”.

Seguridad 

Si bien como resultado del siniestro algunos comerciantes decidieron abandonar el paseo comercial y ubicarse en otro lugar, otros como Ruth, que posee una blanquería, se niegan a hacerlo y apuestan a la recuperación del espacio.

“La gente no sabe que reabrió la galería y que es igual de segura a como lo era antes. Es importante que sepan que pueden venir con total tranquilidad y que de a poco vamos haciendo mejoras, como el haber abierto el acceso con la galería Cocega,  que fue positivo. Ahora estamos esperando con ansias que se abra el acceso de la calle 64”, señaló.

Enfatizó que “los comerciantes estamos poniendo todo de nuestra parte, hicimos mucho para lograr esta reapertura parcial hasta que podamos lograr volver a ser lo que éramos antes. Así que le pedimos a la gente que venga, que nos acompañe, que se van a encontrar con locales con precios competitivos y en el corazón del centro de la ciudad”.

Una vida en la Central

El incendio de la Gran Galería Central, no sólo impactó por sus pérdidas económicas. Para algunos, el paseo comercial del centro de la ciudad de Necochea tiene un significado que supera lo netamente tangible y atraviesa vivencias y recuerdos.

“Yo aprendí a caminar ahí adentro. Tengo un amor muy especial por todo el edificio, significa mucho para mí y para mi familia porque soy nieto de uno de sus fundadores. Cuando se creó la Galería, la idea fue dejar algo de avanzada para seguir impulsando el crecimiento de  la ciudad”, expresó Ignacio Inda, propietario y vecino de toda la vida, de la Galería Central.

Añadió que “con ese objetivo, fue que la hicieron y pensaron cada detalle, la estructura del edificio da cuenta de lo que fue para la época y por eso, obviamente, es un dolor inmenso verla en este estado”.

Situación Compleja

“La situación es compleja. Hay gente que perdió todo y no se pudo levantar. También hay casos de propietarios que tienen que seguir pagando expensas de locales que todavía permanecen cerrados. En nuestro caso en particular de 6 locales que somos propietarios, solo tenemos 3 en alquiler porque los restantes todavía no están autorizados a ser abiertos,  pero los gastos siguen corriendo” enfatizó Inda. ////

Solidaridad para recuperar un emblema

Frente a este escenario de incertezas y preocupación, también hay espacio para la esperanza. Más allá de propietarios y comerciantes, son muchos los vecinos que desde el momento del incendio han ofrecido su solidaridad. 

Ya sea de manera individual o a través de una ONG, como el caso de Martín Salcedo mediante “Brisas solidarias”.

Las obras

“Nuestro compromiso es un trabajo en conjunto entre la administración del edificio, los comerciantes, el municipio con el aporte de los andamios  y  todos los vecinos que continuamente participan, en lograr  llevar a cabo esta labor lo más pronto que se pueda, con el objetivo de poner de vuelta en valor la parte central de la galería”, señaló Salcedo.

Agregó que “ahora estamos utilizando la hidrolavadora para retirar los restos de mampostería que quedó pegada y la idea es que quede todo a nuevo como fue el resultado del trabajo que hicimos en la calle 66”. 

Y explicó que “si todo sale bien, queremos llegar a diciembre de la mejor manera posible para que la gente vuelva a hacer las compras navideñas en este espacio comercial”.

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