La vigencia del tango y los temas de actualidad
En más de un siglo fue subsistiendo, a veces con indudable éxito y en otras décadas con apagada vigencia
Por Dimas Marzoto, para Ecos Diarios
Siempre estamos discutiendo la vigencia de nuestra música ciudadana “el tango”, pero siempre, como dice el destacado crítico de La Nación, Mauro Apicella en su artículo del 22 de abril de 2017 “La utilidad de famosos tangos centenarios”, nos sirven para recordar los comienzos del tango y su actualidad, que a través de décadas de vigencia siempre revive en el alma de los corazones de los rioplatenses. Y es así como nos cuenta la publicación titulada “Cien años de periodismo”, de agosto de 1940 del diario La Nueva Provincia, de Bahía Blanca, acerca de cómo se fue creando el tango a partir de ese “…incipiente fenómeno musical muy enraizado en nuestra poesía gauchesca pampeana, así como los vivacs de la soldadesca en torno a los campamentos…”, donde empiezan las primeras coplas romances, con sus improvisados cantores y payadores, en pulperías y al son de las guitarras, donde en 1905, alguien como Angel Villoldo, le pone música a aquella canción “La morocha” y, que allá por 1800, el pintor Jean León Pallière sintetiza en su cuadro llamado “Idilio criollo”.
Desde aquel entonces en más de un siglo el tango fue subsistiendo a las décadas, algunas de indudable éxito y otras de apagada vigencia. Pero el tango ya tiene luz propia,,ya es ciudadano del mundo. Hay festivales mundiales en todas partes del mundo pero es evidente que sigue siendo la música rioplatense que se irradia desde La Reina del Plata, y entonces vemos la crónica diaria donde nos habla de cómo brilla en las principales capitales del mundo.
Actualidad
También se involucra su letra en los tiempos actuales y tan es así que Gabriel Plaza habla el 17 de agosto de 2017 en el diario La Nación “cuando el tango habla de la violencia de género”.
En mi opinión muchos tangos en el cual, sus autores de las letras, han hablado ya sea en primera persona o a través de sus figuras, de sentimientos femeninos, de sus derechos de mujer, de los hijos, de sus padres, y esas cosas que hoy se dan a llamar “violencia de género”. El poeta habla de las costurerita que dio el mal paso, del pibe que le cuenta a la madre que recibió una carta para debutar en el fútbol, de las madres que sufren porque sus hijos han ido a la guerra. Qué gráfico aquel tango en cuyos versos habla de aquella piba que se fue por el oprobio que tendría al tener su hijo extramatrimonial antes de sus “veinte primaveras” y al volver a su casa bautiza al purrete y dice el tango “…¡por eso es que bailan los cosos de al lao!…”
Y ese tango que interpretara Agustín Magaldi titulado “Levanta la frente”, que le canta a la madre soltera para darle su afecto, además ese otro titulado “Madre”, de Servetto y Pracánico, y que sus versos dicen “Madre, no hay cariño más sublime ni más santo para mí…”, recordando al tango “Silencio” que tantos escuchamos por Carlos Gardel que habla de la madre que le dio cinco hijos a la guerra de Francia, tango que está a flor de labios en los recuerdos de cualquier tanguero.
La mujer
El tango le habla a la mujer, desde que es piba diquera, que pasa por madre, que cría a sus hijos, que recibe a sus nietos y que es fiel consejera en sus horas finales de los hijos que quedan.
Podemos hacer una retahíla de tangos que hablan de la mujer en todas sus condiciones y que vienen desde que el tango es tango, donde sus poetas exaltaron al amor que ellas dieron a sus padres, a sus hijos. Que cuidaron del amor de su familia y de aquellas hijas que cuidaron de su madre como preciada joya.
Es lógico pensar que cuando se habla hoy de que se da a llamar “violencia de género” es un modernismo que ya fue denunciado en los tiempos pasados y tanto es así que si buscamos la palabra “femicidio” no figura en el diccionario Enciclopédico Hispano-Americano de 1912. Si bien hasta la fecha la condición social de la mujer sumó hechos y derechos similares a los hombres, hoy una mujer llega a la presidencia de una Nación; preside supremas cortes de Justicia, comanda poderosos ejércitos, llega a títulos académicos a la par de los hombres, dirige poderosas empresas que manejan la economía del mundo, son inigualables atletas, muchas veces superando a los hombres y tal es así que hay campeonas mundiales de boxeo.
Espejo
Por lo tanto, el sexo débil quedó para el recuerdo de algún tango, Hoy podemos hablar que ya se ha instalado en la sociedad que los pensamientos o prácticas dañinas del hombre contra la mujer y también de aquellas de la mujer contra el hombre. Por eso, no nos asombra cuando se casan dos hombres o dos mujeres y adoptan hijos. Y como dijera Eduardo Galeano “…el miedo de la mujer a la violencia del hombre es el espejo del miedo del hombre a la mujer sin miedo…”.
Podemos decir que todo tiempo pasado fue mejor pero no sabemos si el futuro tiempo que viene será mejor. La realidad es que el ser humano con sus cambios generacionales nos lleva a un futuro incierto, lleno de falsedades, inseguridad, dudas, problemas, es aleatorio, impreciso y titubeante.
Tendremos la suerte de que algún poeta tanguero en sus versos nos llene de ilusiones, y el mundo sea como aquel tango “Color de rosa” y Aníbal Troilo nos llene los oídos con las melodías de su maravilloso bandoneón y, a lo lejos, lleguen los versos en la voz del cantor de todos los tiempos, Carlos Gardel.///