En la tarde de ayer, un incendio de gran magnitud se desató en las sierras de Tandil, provocando alarma en los habitantes de la ciudad. El foco comenzó en el área que separa Las Ánimas del Parque del Bicentenario, y rápidamente se expandió, exigiendo un intenso esfuerzo por parte de los bomberos para contenerlo.

La situación comenzó a tomar forma cerca de las 16:00 horas, cuando los vecinos de la zona alertaron sobre la presencia de "lenguas de fuego" visibles desde varios puntos de la ciudad. Los bomberos del Cuartel Central de Tandil llegaron rápidamente al lugar, utilizando dos camiones hidrantes para tratar de frenar el avance de las llamas. Poco después, se sumó al operativo una unidad del Cuartel de Villa Italia, ante la creciente magnitud del incendio.

Sin embargo, las características del terreno, con pendientes pronunciadas y de difícil acceso, complicaron las labores de extinción. Ante esta dificultad, los bomberos optaron por una estrategia más directa: se adentraron en la zona afectada a pie, utilizando mochilas hidrantes de 25 litros para combatir el fuego lo más cerca posible de las llamas.

A pesar de sus esfuerzos, el fuego se propagó rápidamente, alcanzando una extensión cercana a los 800 metros y acercándose peligrosamente al Parque del Bicentenario y a las viviendas situadas al pie de las sierras. Esta cercanía generó preocupación entre los residentes de la ciudad, quienes temían por su seguridad.

El fuego avanzaba hacia la ciudad, lo que llevó a las autoridades a reforzar la presencia de personal en el lugar. Así, a las 21:00 horas, llegaron efectivos de la Policía Ecológica para colaborar en la extinción del incendio. Los factores climáticos, con altas temperaturas por encima de los 30°C, baja humedad y fuertes ráfagas de viento superiores a los 30 km/h, favorecieron la propagación de las llamas, lo que complicó aún más la tarea de los bomberos.

A pesar de las recomendaciones emitidas por las autoridades para prevenir estos siniestros, los incendios fueron inevitables. El calor extremo, especialmente en los primeros días de lo que se prevé como la semana más calurosa del verano, hizo que las llamas se desataran con fuerza en las sierras de Tandil. Un numeroso grupo de vecinos se acercó al Lago del Fuerte, cerca del Monumento al Fundidor, para presenciar de cerca el trabajo de los bomberos.

A pesar de los esfuerzos continuos por parte de los equipos de emergencia, aún no se ha determinado el origen del incendio. Las autoridades continúan trabajando para sofocar las llamas, mientras la comunidad sigue atenta a la evolución de la situación.