El mismo individuo que la semana pasada fue aprehendido en el barrio Campana, cuando circulaba en una motocicleta robada, quedó ayer detenido en relación a un robo ocurrido el 31 de octubre en un comercio de 75 entre 68 y 70.

El individuo que cuenta con frondosos antecedentes, se fue a vivir al sur hace unos años y en 2019 fue condenado por dos robos en Neuquén. Por esos hechos fue condenado a cinco años de prisión, pena que recién cumplirá el 22 de marzo de 2024.

No obstante ello, en septiembre de 2021 fue beneficiado con salidas transitorias y recién en diciembre próximo iba a contar con libertad asistida.

Sin embargo, ayer fue detenido en relación a un robo ocurrido en un comercio de avenida 75 entre 70 y 68 y se sospecha que podría estar vinculado a otros dos asaltos: uno en 52 y 75 y el otro en 75 y 64. 

Todos estos hechos fueron cometidos por dos individuos que circulaban en moto y que quedaron registrados por las cámaras del Centro de Monitoreo. El raid delictivo fue realizado entre los días 29 y 31 de octubre.

Días después el hombre ahora detenido fue interceptado por personal policial en el barrio Campana y aprehendido por encubrimiento, ya que la motocicleta en la que circulaba era robada.

La investigación

El miércoles personal de la DDI Necochea realizó dos allanamientos en el marco de una causa que se encuentra a cargo del fiscal Carlos Larrarte, titular de la Unidad Funcional de Instrucción Nº 30.

En las últimas semanas Larrarte había iniciado causas por distintos robos en la ciudad y se vislumbraba distintos elementos con los cuales se podría inferir que se trataría de los mismos autores en cada uno de los casos. 

En ese sentido una de esas investigaciones fue la punta del ovillo que permitió esclarecer, hasta el momento, al menos cinco casos más. 

Todo comenzó el 31 de octubre cuando un hombre de 47 años denunció que en su comercio, un mercado situado en avenida 75 al 4800,  habían ingresado dos delincuentes armados con cuchillos quienes mediante amenazas lograron sustraer una notebook. 

En la huida, a bordo de una motocicleta, los malhechores perdieron el botín producto del robo, ya que se les cayó la computadora. 

A partir de allí los agentes de la DDI local comenzaron a hacer una serie de tareas de campo, en procura de esclarecer el caso, y entre ellas efectuaron un relevamiento de cámaras de seguridad, tanto privadas como municipales.

De esta manera no sólo lograron reconstruir el recorrido realizado por los ladrones, sino también reconocer en las imágenes a uno de los hombres, el cual cuenta con amplios antecedentes penales. 

Con los resultados obtenidos en la investigación, el Fiscal solicitó a la Justicia de Garantías Departamental dos órdenes de allanamientos y la orden de detención del sospechoso identificado. 

Finalmente ya con la órdenes de allanamientos, los efectivos policiales irrumpieron simultáneamente  en dos viviendas, una en calle 76 al 4300 y la restante en calle 86 al 3300.

En estos lugares se procedió al secuestro de prendas de vestir que el sospechoso habría utilizado al momento de perpetrar el robo. 

Luego de ello la comisión investigativa se constituyó en la Comisaría Primera, ya que el sospechoso se encuentra detenido allí desde el 2 de noviembre, cuando había sido aprehendido con la moto e imputado por encubrimiento y resistencia a la autoridad.  

Una vez en la citada dependencia policial, el personal de la DDI notificó que a las causas por la que ya se encuentra detenido ahora se le suma otra por “robo agravado por el uso de arma en grado de tentativa”.