Los guardavidas volverán con más protocolos y precauciones
Comenzarían el 15 de noviembre. Mantienen diálogo con el Ejecutivo para definir más detalles y colaborar con los controles
Los guardavidas vienen manteniendo reuniones semanales con el Ejecutivo municipal para establecer los lineamientos de cara a la temporada. En dichos encuentros, han dejado definido que, de no haber grandes cambios, su labor en las playas estaría comenzando el 15 de noviembre próximo, para finalizar el 15 de abril. Por su parte, los guardavidas privados comenzarían el 1º de diciembre y terminarían en marzo. Por tal motivo, han pedido maximizar las precauciones al meterse al mar antes del inicio de la actividad.
En cuanto a la forma de trabajar, los guardavidas están hablando con el equipo del intendente Arturo Rojas acerca de los equipamientos necesarios para hacer su trabajo en medio de la pandemia, los cuales deberán ser más numerosos que otros años.
En este sentido, desde la Asociación de Guardavidas Necochea-Quequén indicaron que deberán trabajar teniendo en cuenta que en el momento de elegir un elemento o técnica de rescate deberán focalizarse en el objetivo de mantener lo más posible el distanciamiento social.
Además, destacaron que contribuirán, en la medida que puedan, a mantener el distanciamiento entre colegas y en generar conciencia en quienes lo rodean, para que el virus no se disperse. Es importante destacar que además de la distancia social, también deberán usar barbijo y desinfectar todos los elementos de trabajo en cada cambio de guardia.
¿Menos gente?
“La situación de este año va a ser excepcional por la pandemia y nosotros observamos también que hay gran cantidad de jóvenes que al no haber podido irse a estudiar ni tener clases presenciales en primaria y secundaria, han ido a la playa. Por eso creemos que va a haber mucha gente incluso en los primeros días de noviembre”, manifestó Pablo Suarez, titular de la AGNQ.
Cabe recordar que la asociación local ya presentó hace un mes un protocolo de trabajo ante la Municipalidad, el cual se trabajó con otros los sindicatos de la costa atlántica. “Observamos lo que fueron los veranos europeos y hay un montón de normas que deberemos cumplir nosotros mismos para tomar los recaudos necesarios. Creemos que tendremos que ser los primeros en dar el ejemplo, sin dejar de hacer lo que tenemos que hacer, que es mirar el agua. Trataremos de orientar a la gente para que tengan responsabilidad social, más allá de que seguro habrá más inspectores caminando la playa”, dijo Suarez.
Desde la AGNQ consideraron que no habrá este año “una persona al lado de la otra”, como en otros veranos, porque los que tengan la posibilidad de irse más lejos lo van a hacer. Por este motivo, tratarán de incorporar, al menos durante enero y febrero, más cantidad de guardavidas para dar una mayor cobertura en zonas alejadas. Actualmente son 108 municipales y alrededor de 80 privados.
El rescate del ahogado
En cuanto a los rescates, si bien suelen contar con máscaras o boquillas para hacer los RCP, van a solicitar más cantidad y más cantidad de desfibriladores. “Estamos en plena negociación para tratar de tener todo el equipamiento por parte de la Municipalidad. Solicitamos una cantidad importante de radios de comunicación y ya nos han garantizado tres camionetas para el traslado de víctimas. Sobre todo para el contacto con zonas alejadas”, dijo Pablo Suarez.
En un documento de la Universidad Atlántida Argentina que fue dado a conocer esta semana, se presentó información detallada sobre la prevención, los elementos a utilizar, las adaptaciones técnicas, las recomendaciones y sugerencias, para todo lo relacionado a la tarea del guardavidas, de cara a la cercana temporada.
Cabe destacar que dicho documento, escrito por Martín Javier Del Gaiso, Fabián Dardik y Adrián Petrini, contó con el apoyo y respaldo de dos guardavidas locales: Ariel Funes (de la Escuela de Guardavidas de la Cruz Roja Filial Necochea) y Diego Puccia (miembro fundador de GIDSA).
Allí se indica, por ejemplo, que “el principal camino para evitar el contagio sería: la prevención, el distancia-miento social y la higiene personal”, considerando que “la presencia del Covid-19 obligará a una serie de modificaciones en base a la labor diaria”. También se adjunta la imagen que acompaña esta nota, donde se propone delimitar un perímetro alrededor de la torre de guardavidas, con un área de desinfección de los elementos y el correspondiente distanciamiento entre sombrillas.