Los perros sueltos en la calle siguen siendo un problema
La mayoría tienen dueños, pero no se hacen responsables de lo que hacen. Muchos los pasean sin correa ni bozal. El CAAN tiene 250
Pasan los años y los perros sueltos en la calle continúan siendo un problema y hasta un peligro para las personas que andan caminando, en bicicleta o en moto.
Es muy frecuente ver que en muchas casas se opta por dejar el perro suelto en la puerta que da a la calle. Esto es un gran error porque allí los animales tienen la libertad de salir a ladrar a todo el que pasa, lo cual genera que haya veredas por las que ni siquiera se pueda pasar. Además, no siempre se tiene la “suerte” de que solo salgan a ladrar, porque ante cualquier movimiento brusco, el riesgo de mordedura aumenta.
Como si eso fuera poco, algunos dejan sueltos a perros que son de grandes dimensiones e incluso agresivos, lo cual hace que el temor de quien pasa en bicicleta o en moto sea mayor y se genere una inevitable y brusca maniobra de evasión con el rodado, que puede terminar en un accidente de tránsito.
Si bien el número de castraciones ha hecho que disminuya levemente la cantidad de perros callejeros, el problema siguen siendo los que tienen dueños que no los cuidan y los tienen en la vía pública.
En este sentido, se observan también personas que sacan a pasear sus canes por las veredas sin bozal y, la mayoría de las veces, también sin correa, con el pretexto de que para ellos son perros “buenos”. El problema no solo aparece cuando alguien quiere pasar caminando cerca y no sabe cómo va a reaccionar el animal ante un desconocido, o si se está paseando un perro con todas las medidas de prevención existentes y se le acerca otro perro que es “paseado” sin correa para pelear.
Dicho esto, es hora de que cada cual se haga responsable de sus mascotas y que las mantengan dentro de predios cerrados, evitando así peleas de perros en la calle (que luego terminan siendo atendidos por el CAAN y generando un gasto a la entidad que habitualmente tiene serios problemas económicos), rotura de bolsas de basura, posibles mordeduras y malos momentos a la gente que debería tener total libertad de pasar por cualquier vereda, sin el temor de que un perro suelto la muerda.
También es hora de exigir desde la Municipalidad y Bromatología que se denuncie a quien tenga perros sueltos de manera constante, para poder así actuar en consecuencia y terminar con este problema.
Castraciones y cuidados
Es importante destacar que el quirófano móvil, que estos meses de septiembre y octubre está en 59 y 12, ha realizado más de 24.000 castraciones, lo cual ha sostenido medianamente la proliferación de perros callejeros pero no la ha disminuido.
Por su parte, el Centro de Ayuda al Animal de Necochea (CAAN), tiene una enorme cantidad de perros en su predio que esperan una adopción responsable, y no como hacen quienes los dejan en la puerta de la casa sin responsabilizarse de cómo actúen con todo el que pasa por enfrente.
“¿Qué está pasando con los humanos? ¿Por qué cuesta tanto responsabilizarse de una mascota?” se preguntaban el miércoles desde el CAAN al mostrar fotos de una perra que “tenía dueños y apareció un día en su casa” gravemente lastimada “porque no supieron cuidarla”. “Necesitamos toda la ayuda posible para su recuperación, y sus gastos de veterinaria, con lo que puedas colaborar siempre es recibido”, pedían a la comunidad, por uno de los tantos casos de animales que terminan en la calle, aun teniendo dueño.///
“Hay una ordenanza pero no se le presta atención”
Elena Zimmermann, miembro de la comisión directiva del CAAN, contó que en el predio tienen alrededor de 250 animales que son sacados de la calle. Casi todos perros. “Varía mucho el número, porque habían bajado pero ahora entraron un montón más otra vez. Lo más difícil es el alimento y los gastos veterinarios”, afirmó.
“Estamos en una discusión con el municipio, porque le estamos pidiendo que aumente la cantidad de castraciones, porque las que están haciendo es lo mismo que nada. No sirve. Es una gota de agua en un desierto, por eso también lo estamos hablando en el Concejo Deliberante, porque no hay mejora, sigue habiendo muchos animales en la calle y no se informa ni se concientiza a la gente”, indicó Zimmermann.
Por otro lado, afirmó que “hay una ordenanza vigente pero nadie le presta atención”. “No se cumple ni se hace cumplir”, indicó la secretaria del CAAN, respecto a la reglamentación que exige sacar a los perros con collar y correa, mientras que si es de gran porte o una de las consideradas “razas peligrosas” debe tener también bozal.