Marcos Richards jugará en la Liga Argentina de vóleibol
Cerró su continuidad en Once Unidos de Mar del Plata, que había confirmado su participación hace 10 días. “Es algo que vengo esperando desde hace un montón de tiempo”, expresó
Dando el paso más significativo en su carrera, Marcos Richards jugará la próxima Liga Argentina de Vóleibol con el equipo de Once Unidos de Mar del Plata. El punta surgido en el Club Huracán de nuestra ciudad cerró su vínculo para continuar en la pujante entidad del Parque Luro, que había confirmado su participación en la máxima categoría nacional hace apenas 10 días. “Sé que es una experiencia única y la vengo esperando hace un montón de tiempo. Vengo mirando la Liga por televisión y ahora la puedo jugar, vivirla en carne propia, salir en la tele por primera vez”, compartió feliz al respecto Richards.
Recorrido
A pesar de sus apenas 17 años (cumplirá 18 el mes próximo), el necochense ya cuenta con dos temporadas en la Liga A2 con este mismo equipo, además de una experiencia previa en la misma categoría con la Selección Sub-17 en 2018. También sumó partidos en las inferiores del Club Vélez Sarsfield en 2017, jugando en un torneo en Brasil. “Tengo bastante experiencia si para lo chico que soy. La idea era subir un pasito más. Probarme en una Liga A1. Mi pase se me había terminado, porque era para la A2, y por suerte me llamaron otra vez. Es como un ciclo para mí. Empecé (en Once Unidos) con la Sub-17, después dos años en la Liga A2, es un ciclo maravilloso. Siempre fuimos los mismo jugadores, hay una conexión de equipo muy buena, es como en Huracán, somos todos una familia”, compartió.
Por un puesto
Debido a las restricciones del aislamiento preventivo por la pandemia del coronavirus, Richards lleva más de siete meses sin ver a sus compañeros. Ha venido entrenando en lo físico y, desde que se flexibilizó la cuarentena, también con la pelota en el Club Huracán de nuestra ciudad. Ahora espera sumarse pronto a las prácticas en la ciudad de Mar del Plata. Por las restricciones, recién esta semana Once Unidos comenzó a entrenar con la pelota, por lo que no estará en tanta desventaja en la pelea por un puesto. “Sé que no soy titular y me tengo que esforzar para entrar. Pero al irse Facundo Funes a último momento a Israel, quedaron 4 o 5 puntas y espero poder pelear un lugar. Llamaron a un central más, después somos los mismos”, remarcó. En el plantel para la Liga se encuentra el marplatense Mauro Zelayeta, hijo de Ana María Comaschi.
Con cambios
La próxima Liga Argentina de Vóleibol se encuentra en pleno proceso de preparación organizativa, entre las variables que impone la pandemia. Por el momento está previsto que inicie en diciembre y se dispute en distintas “burbujas” con partidos durante 9 días en una misma sede. Varios equipos (Bolívar, Gigantes del Sur) desistieron de participar y así la Aclav decidió invitar a clubes que había competido en la inconclusa Liga A2 este año. Y Once Unidos aceptó el desafío. La incertidumbre, además de la crisis económica, generó que muchos jugadores de primer nivel dejaran el país para probar suerte en Europa, donde la competencia ya se ha retomado. “Muchos se fueron y este año el nivel será un poco más bajo. Pero igual se que voy a poder jugar frente a equipos que tienen mucha historia, estoy muy ansioso”, anticipó Marcos.
Consejos del tío
Como entrenador y siendo parte de la familia, Marcos sabe que siempre tiene una voz autorizada en tu tío, nada menos que Pablo Meana. “Siempre me está marcando las cosas que tengo que mejorar, es como un compañero y es un placer tenerlo dando concejos”, apuntó además de confesar que fue él quien le aconsejó dejar la posición de líbero en la cual venía jugando en sus primeros años. “Quiere que juegue de punta, ya que soy zurzo y no hay tantos. Tengo que entrenar salto y fuerza, y lo demás lo iré mejorando a su tiempo”. La chance de jugar en el máximo nivel nacional será clave en la continuidad de su formación como jugador.
Jacobsen, el último
Axel Jacobsen, reciente campeón con el Panathinaikos en Grecia, es hasta el momento el último jugador de nuestra ciudad en jugar en la máxima categoría del vóleibol nacional.
El armador disputó su última temporada en la 2016/2017 con Bolívar. Previamente había sido campeón de la Liga con UPCN de San Juan, además de bronce en el Sudamericano de Clubes.
Fue el final de una continuidad necochense en la elite que había comenzado con el equipo de Luz y Fuerza. Los hermanos Meana fueron los que completaron una mayor trayectoria. Pablo pasó luego por Club de Amigos, Koyote de Salta, Vélez y Bolívar (ganando cuatro títulos). Mientras que Martín lo hizo en UPCN de San Juan, La Unión de Formosa, Gigantes del Sur, Buenos Aires Unidos, Sarmiento de Corrientes y UNTREF.