Alejandro Beltrán 

Redacción 

No son tiempos fáciles, aunque no lo son hace tiempo, y a la hora de poder convertirse en un emprendedor si no se tienen todos los datos, se pueden pasar malos momentos. Mariano González explicó todo lo que conlleva abrir las puertas de un local comercial en Necochea. “Lo primero que tiene que hacer una persona que quiere emprender una actividad comercial, es averiguar sí donde desea ponerlo está habilitado”, dijo, pero más allá de esto, que es una cuestión de ubicación y que hasta se podría habilitar por una medida de excepción, hay otras que son las que terminan dando un verdadero dolor de cabeza.

“Hay que interiorizarse de todo el gasto que le va a llevar dar de alta su negocio, que lamentablemente es mucho y en eso venimos trabajando hace tiempo con la Municipalidad de cómo se puede bajar el tema del dinero y el tiempo, que también hay que tomarlo como un gasto”, apuntó.

Desde la Cámara Comercial de Necochea y Quequén se encuentran en charlas y reuniones permanentes con los funcionarios municipales, y en ese diálogo abierto apareció un proyecto de parte del sector privado. “En la Cámara vamos a empezar a tramitar una gestoría, para que después se concentren todos los trámites en un solo lugar, que sería en nuestra institución, ya que la idea es poder solucionarle todos los temas a quien desea abrir un comercio. Estamos en conversaciones con Producción, y todo el municipio, para ver de qué manera la podemos llevar adelante”, explicó.

Entre los ítems que encarece poder abrir las puertas del lugar tenemos lo que es planos, seguros, instalación eléctrica, ignífuga, permisos, reestructuración, bomberos. Por todo esto es que Mariano González afirma que “el emprendedor antes de arrancar, ya la pasa mal”, que sin haber podido levantar la cortina se va a encontrar con gastos que de movida superan el millón de pesos entre el alquiler de un local y algún trámite pequeño más.

Difícil situación y las estadísticas oficiales

El presidente de la Cámara Comercial declaró que “el comercio es un barco viejo que hace agua por todos lados y estamos emparchando, y no le encontramos la solución. Estamos en presencia del cambio de comercio más grande de los últimos 100 años”, ya hablando a nivel macro, pero sin dejar de mirar lo micro, lo que sucede en la ciudad puso el ojo en el crecimiento de otras ciudades y dio una explicación acerca de esto.

“Nosotros vemos que el comercio no crece, pero siempre se le echa la culpa al gobierno o al estado. Ahora Mar del Plata creció, Tandil lo mismo, San Cayetano, igual. Ahora ¿Qué tuvieron todas estas ciudades en común? Políticas públicas a largo plazo, ya que por ejemplo un proyecto comercial te lleva más o menos cinco años, donde en el primero te cierra el 90% y del restante, entre un 7% y un 8% en los otros cuatro años. Por eso los locales que se convierten en clásicos son muy pocos”, argumentó.

Los locales comerciales en las ciudades pequeñas y los pueblos hoy enfrentan la globalización, donde el e-comerce y las tiendas virtuales son los lugares donde cada vez más gente decide comprar, aunque como señaló González, “sólo representan el 25% de las ventas en total”, y que para poder ser competitivo hace falta planificación y ser atractivo. “Tenemos que cambiarle la cara al microcentro comercial viejo de la ciudad ¿Qué paseo tenés? Ninguno. Hay que generar la oferta para que la gente vaya, se entretenga y vea el producto. Sí vos no tenés para ir a gastar tu plata, por sí solo no vas a ir. Ni el Estado, ni el comercio solos lo van hacer, tiene que haber un trabajo en conjunto”.///

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