Nancy Almassio: una militante de la esperanza a través de la poesía
Acaba de presentar su cuarto libro en Puebla, México, antes de hacerlo también en Necochea. Uno de los poemas mutó en video promocional de la ciudad
Nancy Almassio, docente de profesión e inspectora de educación de nivel primario, acaba de presentar su cuarto libro, titulado “Poética de la esperanza”. Lo hizo en la sede de la Secretaría de Turismo y Desarrollo Productivo y en el teatro de la Fundación Educacional de la UPC. Pero antes lo hizo en Puebla, México, tras haberse contactado con otros escritores en certámenes literarios.
De su libro y de su experiencia con las letras habló la escritora en una entrevista difundida este miércoles en el programa “El Ciudadano” en el canal Somos, de Flow, que puede verse desde ahora en Youtube.
- ¿Qué significado tiene este libro “Poética de la esperanza”?
- Significa un momento muy especial en mi trayectoria como poeta, porque ya cuando lo presenté en la Feria Internacional del Libro, en Buenos Aires, advertí que había un cambio en los lectores y quizá también en mi obra.
Cientos de lectores se acercaron al stand de “Los Cuatro Vientos” (la editorial) donde estaba presentándolo y había mucho interés, mucha emotividad en los lectores que abrían el libro.
Quizá, como es el libro que surge luego de la pandemia, había una necesidad de entrar en ese espacio de los valores, de la esperanza. Una poeta chilena, Eugenia Toledo Renner, me ha llamado “poeta del optimismo”. Creo que ese es el camino que todos estamos buscando: una luz, una puerta de esperanza en ese mundo que nos presentó algo excepcional como fue la pandemia y ahora estamos como rearmándonos, viendo cómo sigue este modo de vivir.
- ¿Cuándo publicaste tu primer libro, que fue “Hombres irreales”?
- Fue en 2017, cuando decido hacer un corte a esto de ser alguien que escribe en la soledad, en lugares recónditos, silenciosamente frente al mar, para que mi obra tome forma de libro y poder llegar así a otros que están ávidos de lectura. También para darle continuidad a lo que es la poesía. En ese momento me intrigaban mensajes tales como que la poesía va a desaparecer, que el género lírico no es algo que esté presente en la sociedad.

- ¿Y qué sucedió después?
- Desde ahí comenzó un camino de descubrimiento del lenguaje poético. El sábado 17 de agosto en la Fundación Educacional de la UPC, comencé la presentación diciendo que la poesía me rescató de la soledad y del silencio. Y que le otorgó palabras a mi vida.
Creo que la poesía tiene un valor social muy importante, pero también tiene un valor humano de esa posibilidad de expresar con pocas palabras, con el poder de síntesis que tiene la poesía, manifestar los sentimientos, de transmitir esos mensajes de paz, de esperanza, de fe, de optimismo.
Lo hice a partir de mi función de docente y también de alumna, porque me informé y estudié literatura como para entrar en el mundo de qué significa escribir poesía y como hacerlo de la mejor manera, como para tener las herramientas para poder seleccionar las palabras, Y, como también dije en la reciente presentación, que el poeta pueda tener en sus manos las palabras buenas.
- Escribir sintéticamente en prosa requiere un esfuerzo. Seguramente en poesía, aún mucho más
- Yo he desarrollado un concepto, guiada por mis inicios en profesorado de música. La música es el arte de combinar los sonidos, formando con ellos melodías, armonías y ritmos. Pienso que la poesía es el arte de combinar las palabras para expresar los sentimientos de manera genuina, bella y verdadera.
- La poesía también requiere cierto ritmo, literario en su caso…
- Si, también demanda armonía, ritmos, con similitudes con la música. De hecho, algunas de mis poesías se han hecho canción. Como “Brillan tus ojos”, a la que el compositor necochense Alejandro Sáez le puso música y sonó en la presentación de ese último libro. Hay mucha vinculación entre la poesía y la música. El poeta va buscando palabras, ritmos, musicalidad, pero por sobre todas las cosas el sentido de la poesía contemporánea es expresar los sentimientos. Buscar las palabras para que llegue a expresar lo que el alma del poeta quiere manifestar en ese momento. Es un trabajo artesanal que hace el escritor, de desarrollar una sensación, una emoción, un sentimiento. Y eso transformarlo en palabras, que tenga una coherencia, que tenga también una estructura. Porque la poesía, si bien ha cambiado y la rima ya no es tan estricta, ya sea la rima consonante o la métrica, sí tiene que tener una estructura de verso, que es lo que no hemos perdido. Sin embargo, está circulando la prosa poética. Justamente es un tema que desde lo educativo estoy trabajando. Voy a empezar a investigar a través de un doctorado en letras, que quizá pueda hacer en México, sobre un nuevo modo de escribir poesía que está surgiendo.
- Siguiendo con tus libros, el segundo fue “Mujeres reales”
- Ese fue presentado en 2018 en la Fundación Educacional de la UPC, que me ha abierto siempre las puertas, lo cual agradezco mucho.
- ¿Y “Amores invisibles”, que fue el siguiente?
- Fue escrito en 2019 y editado en enero de 2020. Ese año no hubo Feria Internacional del Libro, debido a que teníamos el confinamiento. Así que fue presentado en la feria del 2022. En ese caso no hice la gira minuciosa como en los otros casos, donde recorrí La Dulce, Juan N. Fernández, Lobería, San Cayetano, Tandil y hasta Bahía Blanca llegué. También hice una presentación en Trelew. Los libros me han dado satisfacciones y he conocido poetas. Y este último libro tiene muchas sorpresas más..
- Precisamente, cómo es que terminás presentándolo en Puebla, México?
- A través de los certámenes literarios un poeta se contacta, establece vínculos con otros escritores, con poetas de distintos lugares. El Centro Cultural Kem Kem genera certámenes, donde tuve oportunidad de participar y obtener algunos premios. Ahí conocí a Raúl Viejo Lobo D’Alessandro, un poeta marplatense. Un día me llama y me invita a participar de un stream con México, en un portal llamado Sabersinfin.com. Se trataba de hacer lecturas poéticas con otros autores latinoamericanos. Y acepté la propuesta. Yo no había escrito este último libro, estaba con “Amores invisibles”. Así que participé en octubre del año pasado. De Sabersinfin vinieron a la Argentina, se presentaron en Mar del Plata, donde hicieron un reconocimiento a poetas desconocidos de esa ciudad y presentaron una obra mexicana en la Feria del Libro de Mar del Plata. Allí me invitaron al sexto Encuentro Internacional de Poesia Latinoamericana, en Puebla, para representar a la región. Acepté y terminé siendo allí la representante de la Argentina.
Para este entonces ya tenía editado el libro “Poética de la esperanza”, que presenté en la Universidad de Puebla, un lugar maravilloso. Compartí mesas con escritores latinoamericanos y tuvimos la oportunidad de brindar conferencias.
- ¿Sobre qué tema fue tu conferencia?
- Hablé de “Poesía y lenguaje natural”. Desarrollé toda una investigación sobre la evolución de la poesía en el marco de los contextos históricos de la Argentina. Hablé de la gauchesca, del lunfardo, de la evolución que ha tenido la poesía contemporánea, ante un auditorio de estudiantes universitarios y secundarios, como así también de docentes de Puebla.
- Volviendo a tu último libro, también fue presentado en la Secretaría de Turismo
- En mi estadía en México me invitaron de la revista Filigrana a participar junto a poetas mexicanos y un artista plástico. En cada edición hay un poeta invitado. Y me invitaron como poeta extranjera. Esta revista, que se edita en papel pero también tiene formato digital, llega a muchos lugares del continente. Y la ciudad de Necochea está mencionada en ella. Me acerqué a la oficina de Turismo y le obsequié la revista al secretario Matías Sierra. Me ofrecieron generosamente el espacio y el 16 de agosto presenté allí mi libro.
Esa presentación tuvo una connotación particular, porque hay una poesía titulada “A mi ciudad Necochea”. El director de Sabersinfin, Abel Pérez Rojas, le puso voz a la misma. Y el equipo del área de Turismo compaginó imágenes de la ciudad. Eso es ahora un video promocional de Necochea que llegó hasta México, donde será difundido. En el final dice: “Visite Necochea”. Me siento muy orgullosa. El libro tiene muchas cosas bellas. Desde mi lugar de necochenses me hace feliz.
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