Necochea y el viento: entre críticas, una curiosa idea y la propuesta del urbanista Toni Puig
Desde la irritación que provocan comentarios de los foráneos, al aprovechamiento del fenómeno. Estudios que desmienten la calificación
Si hay algo que genera polémicas e irritación en muchos habitantes de Necochea, son las calificaciones de “ciudad ventosa” o “capital del viento”. Dichos generalmente de foráneos que suelen ser exagerados o maliciosos, y en varios casos de personas que nunca estuvieron por acá.
El tema fue eje de la columna semanal basada en el Archivo de Ecos Diarios, que cada miércoles lleva a cabo el periodista Raúl Jáuregui en “Desde temprano”, por Ecos Radio, 97.9 del dial.
Se comentó en la ocasión que esta etiqueta de “ciudad del viento” suele tener como protagonistas no solo a los abonados en opinar “de todo” en las redes sociales, sino a humoristas, por caso Antonio Gasalla, que alguna vez se burló del tema del viento en Necochea en un popular programa de la TV nacional.
Un anuncio sorprendente
La cuestión del viento, que para quienes conocen la costa bonaerense afecta a todas las ciudades balnearias por igual, también ha preocupado a nosotros mismos. Y alguna vez desde el municipio se intentado “tomar cartas en el asunto”.
En la columna de “Desde Temprano” se recordó que, en tal sentido, a fines de julio de 2000 el director de Control Estratégico del gobierno que encabezaba el intendente interino Ramón del Carmen Ortiz, el arquitecto Carlos Goñi, daba a conocer un plan de transformación de las peatonales 83 y 85 y alrededores, corazón de la villa balnearia.
En ese esquema había una llamativa y curiosa propuesta: una “cortina de vidrio para controlar o morigerar el viento” en la esquina de 2 y 83.
El funcionario calificaba a la propuesta como “inédita y única en la costa atlántica” y el objetivo era eliminar las llamadas “peceras” protectoras en las veredas de las confiterías de la citada peatonal.
El plan, que era respaldado por varios integrantes del sector turístico y Junta Vecinal de la Villa Díaz Vélez, consistía en una especie de arcada con un enorme vidrio corredizo del ancho de la calle 83 y dos laterales de vidrios fijos en las veredas laterales, es decir en el primer sector de las respectivas recovas.
A eso se sumarían dos miradores laterales construidos en piedra, a cuya parte alta el público podría acceder por escaleras interiores del estilo caracol, de manera de tener una atractiva mirada del mar y alrededores, todo acompañado por iluminación en la parte superior.
La cortina tenía un costo estimado de 100.000 pesos, pero por entonces faltaba definir cómo sería financiada.
Pese a este tempranero entusiasmo de algunos, la cortina fue quedando prontamente en el olvido y nunca se concretó.

Dos estudios eólicos favorables
Deseosos de sacarnos definitivamente el “karma” de ciudad ventosa, nos solemos complacer cuando aparece alguna información o investigación que nos deja bien parados.
El columnista de Ecos Radio hizo referencia que entre esas buenas noticias, en febrero de 2019 se difundió a través de portal meteorológico Weather Necochea , un estudio eólico que durante dos años se realizó en las distintas ciudades de la costa atlántica, que en alguna medida sirvió para derribar un mito.
Dicho análisis determinó que Necochea tenía “menos viento” que las ciudades de Mar del Plata (sector de Cabo Corrientes), Pinamar, Villa Gesell, Claromecó y Monte Hermoso, todas con un promedio superior en cuanto a mayores ráfagas de viento.
Por otra parte, en marzo de este 2024 se conocieron los resultados de una investigación a nivel mundial llevada a cabo por la Base de la Fuerza Aérea de Nellis, ubicada en Nevada, Estados Unidos, que dio a conocer cuál es la ciudad más ventosa del mundo y las que le siguen.
El primer puesto fue para Wellington, capital de Nueva Zelanda, que experimenta 173 días al año con vientos que superan una velocidad media de 60 km/h, perteneciendo el segundo lugar, y para sorpresa de muchos, a Río Galllegos, en el sur de nuestro país que tiene vientos diarios de 50 km/h durante gran parte del año, con ráfagas de hasta 100 kilómetros hora.
Entre las 10 ciudades más ventosas del planeta que detectó en el séptimo Ushuaia, en el sur argentino. De Necochea en este caso ni noticias.
¿Y si le hacemos caso a Toni Puig?
Buceando en el archivo Ecos Diarios surge que el 25 de noviembre de 2013, un colmado Centro de Acopiadores siguió con atención la charla del español Toni Puig, gurú del urbanismo y una de las figuras que transformó a la ciudad de Barcelona, posicionándola entre las mejores del mundo como atractivo turístico.
En un tono contagioso y con mucho humor, pero basado en la clara observación, este especialista en gestión urbana brindó su inteligente mirada para que Necochea plasmara su marca ciudad.
La disertación fue gestada por el Bureau Necochea y en esa noche de domingo, entre sus tantas ideas innovadoras, Puig hizo foco en la que llamó “ciudad de los vientos”; y sorpresivamente convocó a tomar dicha cuestión como una aliada para crecer.
“El viento no es un obstáculo es fantástico. Hay que hacer del mismo una fortaleza, vender a la ciudad como el mejor lugar para hacer actividades en las que el viento es factor clave, por caso del deporte, y hasta montar una confitería o lugar similar sobre la mismísima arena o escollera, para que los vientos y el mar se transformen en un espectáculo sin igual”, dijo el europeo, quien habitualmente diserta en todo el mundo sobre cómo posicionar a una ciudad.
¿Locura o genialidad? Lo cierto que en su charla el talentoso catalán nos abrió los ojos de que el viento puede favorecernos y ser un aspecto más de nuestras bellas condiciones naturales.
La columna radial completa se puede escuchar en el Spotify de Ecos Radio.
Comentarios
Para comentar, debés estar registrado
Por favor, iniciá sesión