Preocupación en el INTA por un posible DNU que modificaría su autarquía y estructura
Juan Erreguerena, director de INTA Necochea, y Facundo Quiroz, de la Estación Experimental Balcarce, hablaron con Ecos Radio sobre las consecuencias del inminente decreto que impulsa el Gobierno
En las últimas semanas, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) ha quedado en el centro de la preocupación del sector científico y productivo ante la posible firma de un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) por parte del Gobierno nacional. Según trascendidos coincidentes en medios especializados y declaraciones de autoridades del organismo, este DNU implicaría cambios profundos en la conducción del INTA, su gobernanza, su financiamiento y su histórica autarquía.
Actualmente, el Consejo Directivo del INTA está integrado por representantes de los sectores público y privado, con una mayoría relativa del sector privado. Sin embargo, el posible decreto establecería una participación equitativa entre el Estado y el sector privado en la toma de decisiones estratégicas. Esta medida, que aún no ha sido publicada oficialmente pero que diversas fuentes dan por cierta, generó alarma entre trabajadores, investigadores y autoridades vinculadas a la institución.
Una de las principales preocupaciones gira en torno a la pérdida de la autarquía del INTA, establecida por ley. El financiamiento que debería provenir de un porcentaje fijo de las importaciones no se está cumpliendo, y el presupuesto es hoy designado de manera discrecional por el Ministerio de Economía. A eso se suma la posibilidad de cierres de estructuras regionales, reducción de personal y desfinanciamiento de líneas de investigación que no resultan atractivas para el sector privado pero sí fundamentales para el desarrollo nacional.
En diálogo con el programa “Punto de Vista”, que se emite por Ecos Radio, el director de INTA Necochea, Juan Erreguerena, y el director de la Estación Experimental de Balcarce, Facundo Quiroz, compartieron su preocupación ante el inminente decreto.
Erreguerena confirmó que en el interior del organismo ya se da por descontada la publicación del DNU. “En estas últimas tres semanas se viene escuchando muy fuertemente que va a haber un decreto de necesidad y urgencia a través del Gobierno nacional. Eso no llegó solamente como comentario, sino como una certidumbre revelada. Ya se sabe. Lo que no se sabe es el detalle”, expresó a Ecos Radio.
Según explicó, de concretarse los cambios que se están discutiendo, el Gobierno tendría una participación de partes iguales con el sector privado en el Consejo Directivo. Para Erreguerena, eso podría condicionar seriamente el rumbo estratégico del instituto. “Eso hace que las políticas más de gobierno, y no de Estado, puedan llegar a influenciar mucho en la cartera de proyección del INTA”, destacó.
También señaló que el organismo no está recibiendo los fondos previstos por la ley fundacional. “El INTA no es completamente autárquico porque no se está respetando la ley fundacional, donde se nutriría de un porcentaje determinado de las importaciones”, resaltó. Frente a esta situación, advirtió que un cambio en la conducción podría derivar en decisiones que ya se están viendo en otras entidades públicas del sector científico. “Ya lo estamos viendo en otras entidades de ciencia y tecnología, reducciones de personal, cierre de estructuras, cierre de programas o líneas de trabajo. Eso podría llegar a pasar si cambia la conformación del Consejo Directivo”, comentó.
Por su parte, Facundo Quiroz expresó su preocupación ante un escenario que podría comprometer el trabajo histórico del INTA. “No se trata solo de un tema presupuestario. Lo que está en juego es el modelo de desarrollo federal con el que el INTA ha trabajado durante décadas”, señaló. “Si se pierde la capacidad de planificar desde los territorios, con participación activa de actores locales, se debilita seriamente nuestra capacidad de respuesta”, advirtió.
En ese sentido, mencionó que ya se habla del cierre de la estación experimental y sus agencias en el AMBA, así como del recorte de áreas vinculadas a la agricultura familiar. “Se está escuchando muy fuertemente el tema de reducción de personal”, alertó Erreguerena, y también hizo referencia a un proceso de descentralización que afectaría directamente la autonomía del organismo. “Ya esa autarquía no sería tal como la estamos viviendo. Sino que dependeríamos o seríamos un instrumento más de una cartera o ministerial o secretarial”, apuntó.
Finalmente, Erreguerena subrayó que la incertidumbre es muy grande, pero que el rumbo conceptual del ajuste parece definido. Y planteó una advertencia que resuena entre trabajadores y autoridades del INTA en todo el país. “Podríamos terminar dependiendo de una cartera ministerial o secretarial, y dejar de ser un organismo autárquico de proyección nacional y federal”, concluyó.
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