“Quequén y Necochea se complementan bien y los ciudadanos las disfrutamos”
Expresó Leonardo Fresca, martillero y corredor público, quien reside y trabaja en la vecina ciudad desde hace años, donde su familia apostó a desarrollar otra manera de vida
Mario Maruca
Redacción
“Quequén junto con Necochea se complementan muy bien y los ciudadanos podemos disfrutar de ambas ciudades”, fue la expresión inicial del martillero y corredor público Leonardo Fresca, tras la propuesta de Ecos Diarios de ofrecer sus puntos de vista acerca del contexto que se vive.
El residente en la costa quequenense reconoció que “la tranquilidad que brinda Quequén a la familia es algo que se tiene en cuenta a la hora de definir un sitio para vacacionar.
Y a la tardecita-noche, aparece la alternativa de Necochea, con la peatonal 83, la Plaza San Martín y otras propuestas”.
-¿Cuáles son a tu criterio, las cualidades de Quequén, además de la calma?
-Los tamariscos, la cercanía que se tiene con la playa y el mar, el paisaje del Faro, el encanto de las calles internas en el amplio sector costero, con el relieve particular y la arena en los alrededores, eso enamora.
Como también en el caso de Necochea en las zonas del Parque Miguel Lillo y ni qué hablar de las playas tan amplias.
Los Fresca decidieron vincularse con la costa de Quequén allá por los años 1975 y 1976 para aprovechar de las vacaciones y tiempo libre. Por eso que adquirieron un lote y comenzaron a construir la vivienda, que los cobijaría hasta la actualidad.
-¿Acerca de la prestación de servicios, cuál es tu consideración sobre Quequén?
-Esta temporada no hemos tenido inconvenientes con el suministro de agua potable y noto a la ciudad más prolija y a nivel servicios, más ordenada. Las condiciones meteorológicas acompañaron muy bien, con 15 ó 20 días de enero con un calor tremendo y eso ayudó a la presencia de turistas.
-Una continuidad de tantos días de playa era algo que no se atravesaba desde hacía mucho, ¿verdad?
-Considero que hacía varios años que no teníamos esa constancia de temperaturas altas, y quienes trabajamos en esta actividad, esperamos expectantes ahora el feriado del Carnaval. Después de este fin de semana extra largo, las familias comienzan a prepararse para el inicio del ciclo lectivo.
Entiendo que lo ideal en el calendario sería que el festejo de Carnaval estuviese más cercano al cierre de febrero para alargar un poco la temporada estival, pero nos limita la fecha de comienzo de las clases.
“Un buen complemento”
Leonardo Fresca aceptó la propuesta de Ecos Diarios para ofrecer su pensamiento y miradas sobre las realidades que propone el núcleo urbano Necochea-Quequén para quienes lo visiten.
“Hay muchas personas que habitan en Necochea y deciden visitar Quequén, aprovechando las características tan especiales de la playa”, enfatizó el profesional nacido en el Gran Buenos Aires pero afincado desde hace varios años en la costa quequenense.
Y añadió al respecto que “clientes que alquilan viviendas o departamentos en Quequén pero tienen la elección de disfrutar en Necochea de los shows callejeros y en la Plaza San Martín, la variedad de negocios y la Peatonal 83. Por eso digo que ambas ciudades se complementan en sus ofertas”.
Efluentes cloacales y la erosión costera
-Una obra ampliamente requerida por la población en su conjunto es la Planta de Efluentes Cloacales, una deuda pendiente de varios gobiernos. ¿Cuál es tu postura sobre el proyecto?
-Claro si, es un tema pendiente y muy espinoso. Son fuertes inversiones de dinero que deben hacerse, pero el tratamiento de los residuos como corresponde, beneficiaría a Quequén en primera instancia pero de la misma manera a Necochea por la cercanía.
Es una cuenta pendiente de un servicio necesario y valioso para ambas ciudades, en cuanto a lo ambiental y sanitario, para vivir mejor.
-Y la erosión costera, ¿te preocupa?
-La problemática está del lado de Quequén y Costa Bonita, y no tanto de Necochea. La escollera sur favorece en algunos aspectos y no tanto a quienes vivimos en Quequén, ya que protegió a las playas necochenses y no al tramo norte comprendido por nuestra costa.
Sería conveniente realizar alguna escollera a la altura de la calle 541, donde finaliza el asfalto de la avenida 502, que permitiría proteger a la playa central de Quequén, las adyacencias y el sector de Bahía de los Vientos.
Algo ideal podría ser una construcción similar a una T, porque al avanzar las olas, caería el sedimento y acumularía arena en los alrededores. Creo que las escolleras perpendiculares serían un factor beneficioso para recuperar un poco de playa.
Por otro lado, el martillero público también planteó para Quequén, la posibilidad de hacer que la avenida 502 sea mano única en sentido a Costa Bonita hasta la 541 y los vehículos tengan la chance de regreso por calle 506.
El Parque Lillo
-Necochea tiene lo suyo en materias pendientes y en relación a qué hacer con el Parque Lillo, cuál sería tu posición?
-Es un pulmón hermoso que existe para los ciudadanos. Si bien muchos dicen que el parque no se toca, cuando uno viaja y aprecia lugares similares, observa el método utilizado y el aprovechamiento que hacen. Circulando por las calles internas, hacen el raleo necesario de las plantas, las cuales son retiradas para darle oxígeno a las demás especies.
Es bueno mantener el parque en condiciones prolijas, limpias, eso considero que es fundamental en estos tiempos.
-¿Y sobre el complejo casino…?
-Seguramente, en su momento, fue una de las estructuras joyas de la Argentina y con el paso de los años, no tuvo el mantenimiento que exigía semejante edificio. Sabemos que frente al mar, la erosión ha sido cruda para el material utilizado y ahora existen otras alternativas de construcción para que resistan más a las condiciones meteorológicas.
El casino tiene que tener un destino definitivo. Los arquitectos y otros profesionales tienen que evaluar y estudiar si la edificación es recuperable. Y pienso que debería hacerse una combinación entre el emprendimiento privado y la participación del Estado Municipal.
Para que el ciudadano no entienda que ese espacio hermoso y estratégico del frente costero, se destinó solamente a la inversión privada. Y la parte pública, el municipio, puede generar propuestas y servicios a la comunidad que le permitan acceder a ingresos económicos que luego serían volcados en el mejoramiento del lugar.
-¿Algunos hasta han pensado en derrumbarlo?
-Sería una pena eso. En su momento, algún visionario ideó una estructura fabulosa y con el avance de la tecnología que hoy contamos, cómo se puede entender que no salga un buen proyecto de reparación.
De trabajar en Milán, Italia, a Necochea
Leonardo Fresca nació en el Gran Buenos Aires y por cuestiones de la vida, residió más de diez años en la coqueta ciudad de Milán, en Italia, donde se capacitó y trabajo como martillero público.
En la península nació su primer hijo, Federico, junto a su esposa, Marisol, decidieron pegar la vuelta a la Argentina e iniciar una nueva etapa de la vida.
Los padres de Leonardo Fresca incursionaron en Quequén entre 1975 y 1976, cuando la familia decidió apostar a la tranquilidad, lo coqueto del lugar y las bondades naturales que propone la costa quequenense y seduce a cualquiera.
Por ello, que el martillero público no dudó al momento de decidir dónde vivir, o en La Matanza, en el Conurbano bonaerense o disfrutar de un paisaje de mar distinto, con calles de tierra particulares y especies arbóreas de tanta variedad.
Fresca se instaló en la oficina de avenida 502 entre calles 531 y 533, desde donde atiende a sus clientes y brinda servicios a turistas y residentes.
“Vivir en la tranquilidad de Quequén es impagable y los visitantes valoran esta posibilidad”, reconoció Leonardo que tiene a Federico (16) y Valentina (11), sus hijos, como lo más valioso y a Marisol, también pieza fundamental de la familia. ///
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