Recuerdo a víctimas del tránsito
“Hay que crear conciencia en la sociedad con respecto a los siniestros viales”, reconocieron los familiares de quienes murieron en accidentes. Generar nuevas leyes
Declarado por las Naciones Unidas, el tercer domingo de noviembre se recuerda a todas las víctimas del tránsito. En nuestro medio, lógicamente, hay casos emblemáticos que movilizan permanentemente a los familiares de esos fallecidos.
Blanca Camaño, la madre de Darío Ezequiel Burgos (27) se expresó a su manera para conmemorar esta jornada tan triste.
“Las ‘estrellas amarillas’ homenajean a nuestros seres amados perdidos en siniestros viales, ya que se trata de un símbolo en el lugar donde se perdió la vida”.
Precisamente, Darío Burgos fue embestido en el acceso al Puente Dardo Rocha sobre la margen de Necochea y en ese sector está pintada la “estrella amarilla”, además de la mención al joven motociclista que tenía 27 años.
“De esta forma, aparte de recordar a las víctimas, también queremos alertar y crear conciencia en la sociedad, con respecto a los accidentes viales que vemos a menudo cómo se producen”, agregó Camaño.
La mujer reconoció que es necesario “cuidarse, ya que no hay vuelta atrás después de un siniestro vial”.
Prófugo de la Justicia
En cuanto al “homicidio culposo agravado”, del que resultó víctima Darío Burgos, hay que mencionar que el automovilista que conducía el vehículo que embistió al motociclista, aún continúa prófugo de la Justicia.
Se trata del paraguayo Cristino Peralta Gómez, quien tuvo en dos oportunidades el beneficio del arresto domiciliario con salidas laborales y, en la segunda ocasión, aprovechó para fugarse de Necochea.
Ni la Policía de nuestro país ni Interpol, han podido hasta ahora atrapar al individuo que debió ser juzgado a partir de ese 30 de junio de 2017.
El debate quedó trunco porque el automovilista que debió estar sentado en el “banquillo de los acusados”, dos veces se burló de los funcionarios judiciales locales que le otorgaron el beneficio de arresto domiciliario con salidas laborales, algo que no cumplió.
Por leyes reales
“Abrazo desde mi alma a familiares de víctimas de tránsito, la unión hace la fuerza y por siempre estaré en deuda con quien me acompañó a entender y seguir gestionando por leyes reales en la Argentina”, manifestó Andrea Colaizzo.
Se trata de la madre de Leonel de Azevedo, el joven que murió al ser embestido con su moto en la esquina de calles 50 y 69, la noche del 23 de julio de 2013.
“Vos sos mi luz y andar, amado hijo mío, una víctima más de un homicida al volante”, reconoció la mujer que luchó durante años para llevar a juicio oral al conductor del automóvil que atropelló y mató a Leonel de Azevedo.
Un caso sumamente discutido en la Justicia que tuvo diferentes miradas entre los actores, desde la absolución en primera instancia del imputado de “homicidio culposo”, hasta luego el rechazo de esa absolución por parte de jueces camaristas del Departamento de Justicia de Dolores.
Posteriormente, se logró la condena de parte del Juzgado Correccional y algo de alivio para la familia de la víctima. ////
Símbolos. “Estrellas amarillas” pintadas en el acceso al Puente Dardo Rocha, en recuerdo de Darío Burgos y en Diagonal San Martín, en homenaje a Ana Rivero
Amor de siembre. Andrea Colaizzo y Leonel de Azevedo
“Estar siempre fuertes”
“Todas las fuerzas y a no bajar los brazos nunca, siempre fuertes por los que quedan en vida y que nos necesitan y mucho”, reconoció ayer Nicolás D’Annunzio, el hijo de Ana María Rivero, quien murió el 20 de junio de 2020.
En realidad, el siniestro vial se produjo el 6 de junio de ese año, en la Diagonal San Martín casi avenida 59.
Nicolás conducía la motocicleta y su mamá viajaba en el asiento trasero, ambos esperaban que el semáforo diera la luz verde para continuar la marcha en sentido al centro.
Apareció en escena un automóvil a toda velocidad que traspasó el separador central en la Diagonal San Martín y embistió a la moto de las víctimas.
Nicolás D’Annunzió sufrió graves heridas y su madre también. La mujer luchó por su vida durante varios días pero las lesiones que tuvo en el siniestro vial fueron determinantes y falleció.
Encender una vela
“Desde hace años sé el significado de este día, pero no sé cómo expresarlo. Tengo que recordar en esta fecha, cómo arrebataron la vida de un inocente, encendiendo una vela para rememorar la imagen de mi hijo y su energía, que me sostiene y ayuda a continuar en la vida”, señaló Andrea Colaizzo.
Apuntó contra la legislación argentina en la actualidad y, consideró que “si una persona conduce a alta velocidad y embiste a una víctima inocente, eso no es accidente, se trata de un homicida al volante”. ////