Se proyectan varias obras de Wolfang Amadeus Mozart en el ciclo Encuentro Musical
Magnífico evento que se realizó en la Basílica de San Pedro en 1986
Este jueves, a las 18, se realiza un nuevo Encuentro Musical en el Auditórium del Centro Cultural de Necochea, calle 54 N° 3062, conducido por la profesora Ana Gabino. Una vez más pueden apreciarse obras de Wolfang Amadeus Mozart, genial compositor austríaco perteneciente al Clasicismo del siglo XVIII. El programa incluye la Misa en do mayor KV 217, Misa de la Coronación, y el Concierto para piano y orquesta N° 21 en do mayor K 467.
Cabe destacar que con apenas 12 años, Mozart compuso la primera de sus 19 misas. Su abundante obra sacra fue compuesta entre1765 y 1780, cuando aún trabajaba para el príncipe-arzobispo de Salzburgo. Una vez en Viena, desde 1781 en adelante, escribió tres nuevas obras religiosas: la Gran Misa en do menor KV 427, la Misa de Coronación para órgano, coro, solistas y orquesta en do mayor (KV 317) y el impresionante Requiem KV 6262, misa de difuntos que compuso en 1791, años de su muerte.
La Misa de la Coronación es la decimosexta misa escrita por Mozart, para las celebraciones de Pascua de 1779, y al igual que toda la música compuesta en este periodo muestra la increíble madurez del compositor. Parece ser que el sobrenombre de esta misa se debe a que se interpretó en Viena durante las celebraciones de la coronación del emperador Leopoldo II en 1791 o la del emperador Francisco II en 1792.
Festejo
El magnífico evento cuya filmación se proyecta, fue el resultado de un acuerdo realizado durante la visita de Juan Pablo II a Viena en septiembre de 1983. Tiempo después, el famoso director Herbert von Karajan (Austria 1908-1989), uno de los mejores del siglo XX, y la extraordinaria Orquesta Filarmónica de Viena festejaron el Día del Papa con Juan Pablo II (Polonia 1920- Vaticano 2005) en una especial e inolvidable Misa en la Basílica de San Pedro de Roma el 29 de junio de 1986.
El veterano director de 77 años dirigió la Filarmónica, su Coro, y también el Coro de la Capilla Sixtina del Vaticano. La Misa en do mayor, KV.317” Misa de la Coronación” de Wolfang Amadeus Mozart (Austria 1756- 1791) estuvo interpretada con artistas de excelencia. Los solistas elegidos para esta ocasión fueron la soprano Kathleen Battle (EEUU), la mezzo-soprano Trude Liese Schmidt (Alemania), el tenor Gosta Winberg (Suiza), y el bajo Ferrucio Furlanetto (Italia). La enorme iglesia estaba colmada por una concurrencia que incluía autoridades civiles y religiosas, diplomáticos, periodistas, y miles de amantes de la música clásica procedentes de todo el mundo. La ceremonia fue televisada en vivo para treinta países.
Juan Pablo II
La misa fue presidida por el Papa Juan Pablo II, pontífice amado y carismático que entonces tenía 65 años y en 2014 fue canonizado. La Misa estuvo concelebrada por numerosos sacerdotes en esta fiesta de San Pedro y San Pablo. Es conocida la enorme afición y conocimiento de la música clásica que tenía Juan Pablo II, participante en coros y dueño de una hermosa voz, puesta de manifiesto durante esta misa “cantada” cuando asumió los solos del celebrante en el difícil estilo del canto gregoriano.
La orquesta, el coro y los solistas asumieron las partes de la misa: Kyrie, Gloria, Credo, Sanctus, Benedictus y Agnus Dei, agregando el célebre Ave Verum Corpus KV 618, obra diminuta que para muchos de sus exégetas es la obra más importante de Mozart, en la cual cada compás resuena cierta sobrenaturalidad. Para algunos teólogos, como el argentino Fernando Ortega, sacerdote y músico, la música de Mozart transparenta un don divino, que trae felicidad y que acerca al hombre a los grandes misterios que rigen su vida. El lenguaje cada vez más despojado acerca a la verdad del hombre en su dimensión trascendental.
El maravilloso Concierto para piano y orquesta N° 21 en do mayor, K467, será la obra final del programa dedicado a Mozart. Es uno de los más populares de los 27 que el compositor escribió para piano. Fue completado el 9 de marzo de 1785 y estrenado un día después en el Teatro de la Corte Imperial y Real de Viena, en un concierto promocionado por el mismo Mozart. La versión que se apreciará fue filmada en la suntuosa Siemens-Villa de Berlín en 1989 por Jean- Pierre Ponnelle y magníficamente interpretada por Daniel Barenboim como pianista y director y la Orquesta Filarmónica de Berlin.