Sin carteles de bienvenida ni señalización para los turistas

Poco amigable. Los accesos no cuentan con indicaciones para llegar a la playa y en las calles se registra un notable déficit para ubicar a peatones y automovilistas

Han pasado 30 años desde que Ecos Diarios titulaba una de sus páginas diciendo que había “déficit en la señalización turística en la ciudad”. Se nos fueron tres décadas y nada ha cambiado.

“No está convenientemente indicado el rumbo que debe adoptar un visitante para llegar a determinados lugares que forman parte de la propuesta del medio en materia de turismo”, decía aquella nota periodística de enero de 1993, haciendo una crítica a algo que lamentablemente no se solucionaría en treinta años, donde han pasado innumerable cantidad de funcionarios.

Uno se podría imaginar un cartel en la ruta 228, por la zona de Energía, que diga “estás a 30 minutos de llegar a la mejor playa argentina”, con una imagen de Necochea o alguna referencia al disfrute del verano. Algún colorido arco que diga “Bienvenidos a Necochea, la mejor playa argentina” en los ingresos o ideas similares para que el turismo se sienta realmente bien recibido desde el primer momento, con una ciudad preparada para tal fin.

Sin embargo hoy la persona que llega se encuentra con cardos, pastizales, luces que no andan y una imaginación nula por parte de las autoridades para darle al turista una bienvenida acorde a lo que se quiere denominar ciudad turística. No hay un solo cartel de “bienvenidos” en cualquiera de los accesos a la ciudad.

Tampoco adentro

A todo esto se le suma que tampoco están señalizadas las calles en las esquinas con el número de las mismas, no hay flechas con carteles que diga “por acá vas a la playa”, “al centro”, o cualquier indicación que haga más amena la llegada a quien no conoce.

Incluso, cuando alguien llega por la ruta 88 e ingresa por Quequén, tiene que hacer uso de un GPS obligadamente para llegar a Necochea o andar preguntando, porque no existe ni un solo cartel que diga dónde doblar para llegar a los puentes.

En otras ciudades, de cualquier parte del país y del mundo, existen mapas turísticos de grandes dimensiones ubicados estratégicamente, ya sea en las paradas de colectivo o en puntos de gran circulación, donde una persona puede ver dónde se encuentra parada en ese momento y qué atracciones tiene para visitar cerca. En Necochea no hay un solo mapa de esos puesto en toda la ciudad, entonces la gente se ve obligada a ir a la oficina de Turismo o de preguntar a algún ciudadano local qué se puede hacer y dónde ir.

Las políticas en materia turística han sido sumamente deficientes en este sentido, ya que hasta el día de hoy se sigue sintiendo que se entra a una ciudad portuaria sin demasiada atención por parte de la Provincia, porque las rutas de acceso están rotas por los camiones, con pastos largos y cereal tirado en todos los accesos porque la barredora no llega ahí y no se cuida la estética para que el turista se sienta que llega a una ciudad que realmente lo está esperando con los brazos abiertos.

Aspectos tan sencillos de solucionar, esperan hace más de tres décadas que alguien tenga un poco de interés en ponerles atención. Mientras tanto, seguimos una ciudad portuaria y agrícola que por uno o dos meses recibe a algunas personas que todavía eligen visitarnos, a pesar de que no podemos darle el recibimiento que deberíamos.///