Un cuerpo de concejales alejado de la sociedad
«El legislador no debe
proponer el bienestar de
ciertos ciudadanos con
exclusión de los demás.
sino la felicidad de todos»
Platón.
Hace 25 años, allá por 1998, este comentarista conducía un programa matutino en LU 13 Radio Necochea desde donde realizábamos diferentes encuestas que, para tener cierta certeza entrevistábamos a diferente personas en el centro, en diferentes barrios y también en la Villa Díaz Vélez; en una ocasión en la que preguntamos sobre los nombres de los concejales, un alto porcentaje no nombraba más de tres o cuatro de dieciocho ediles.
Hace unos días en elecos.com.ar en su habitual sondeo semanal y luego analizado editorialmente en las páginas de Ecos Diarios el 54 % de los participantes de la consulta no conocían un solo nombre de los integrantes del cuerpo.
Es así que después de 25 años la historia vuelve a repetirse porque hoy el 26 % de los lectores conoce más de un concejal, el 11 % más de cinco, el 5 % más de diez y el 4 % manifestaba conocer a todos, el desinterés de la sociedad ante los políticos se muestra evidente con estos guarismos aunque estos sean ajenos a un rigor estadístico.
El Concejo ha descendido desde 1983 en calidad de discusión, fue como perdiendo cierta representatividad y se escucha como repetitivo la frase clásica: “antes había debates de mayor calidad; deberían trabajar «ad honorem, etc, etc.»; también sucede en el orden nacional porque han cambiado los tiempos y parece que hoy al estilo twitter todo se resume en un título faltando la profundidad de los temas.
Cómo vincularse con los vecinos
Transitar los sectores donde está el vecino para ver “in situ” la realidad. Que la definición de un proyecto no sea una carga tan pesada y se especule con el famoso costo político que conlleva ese pusilánime «ni»; la indecisión que encripta los temas y quedan bajo varias llaves en el cajón de los recuerdos. Hay concejales que solo abren la boca para pedir un café.
Es importante abandonar la retórica para la barra circunstancial hay que ir simplemente al bache, la iluminación, la reparación de veredas, arreglo de plazas, embellecimiento de espacios públicos, marcación de las calles, salud, agua corriente, vigilar la gestión del Ejecutivo y no caer en la tentación de colocarle un tinte partidario a cada tema que se trate.
El Concejo Deliberante es un lugar apetecible y se ha trasformado desde tiempo atrás en una suerte de bolsa de trabajo en algunos casos y no siendo pecado tener la voluntad para comienzo de la carrera política en otros.
Para nuestra comunidad el Concejo sigue estando con deudas pendientes desde hace años y, sin generalizar no todos son iguales están quienes privilegian a la ciudad por encima de su propio partido o intereses individuales, condenando a aquellos amigos del «no» desde la oposición a todo aquello que propone el oficialismo o, al revés los oficialistas que suelen hacer oídos sordos a buenas propuestas de cualquiera de las bancas opositoras.
Que las elecciones no paralicen los temas que no pueden demorar
Le preguntaron cierta vez al expresidente de los EE.UU, Barak Obama que pretendía de los legisladores, y respondió «que los tiempos de ellos sean los de la gente, nada más». Definición exacta, sencilla y realista.
Utilizar el equilibrio de la balanza con objetividad, ni apresurados ni retardatarios, ni la siesta eterna ni los apuros irresponsables todo en su término, pero que nada impida avanzar, Necochea no puede darse el lujo de frenar cada propuesta inteligente, si la hubiese, no por el estudio que lógicamente se debe admitir sino por la irresponsabilidad de no concretar la peor acción suele ser la quietud. Porque según el pensador italoargentino José Ingenieros: “Ahora o nunca. Mañana es la mentira piadosa con que se engañan las voluntades moribundas”.
Es inadmisible que para definir un proceso de licitación como viene ocurriendo en la zona de la playa, caso balnearios como el ex ACA que, como en el cuento de la “buena pipa”, se alarguen definiciones, dando vuelta para que aparezcan las imaginarias inversiones y lo que si llega son las temporadas de verano encontrando solo un impresentable maquillajes hasta la próxima.
El dar vueltas para definir tarifas de taxis y ómnibus y, cuando se decide han pasado meses y la inflación que corroe y vuelta otra vez a la misma discusión. Sin abordar la conveniencia o no del boleto plano por ejemplo, innovando, pensado en micros para menos pasajeros más agiles y porque no en apertura a nuevas posibilidades de competencia empresarial con el estudio de nuevos recorridos en una ciudad que avanza desordenadamente ante la falta de planeamiento urbano.
El año impar paraliza. Casi es una excusa para decir «en año de elecciones no podemos avanzar», como si el vecino común parara su actividad por el año electoral.
El futuro del frente costero es tabú tanto en el Ejecutivo como en el Deliberativo es inconcebible que no se tenga en cuenta que por ahí pasa el desarrollo y futuro de Necochea. Decía Gerónimo (Momo) Venegas: “debemos tirar un cable desde Costa Bonita al balneario Los Angeles para que se vayan enganchando las inversiones”. Un acierto del líder sindical de los trabajadores rurales.
Se cerrará de una vez por todas un proyecto para el parque «Miguel Lillo» o será una grieta entre los que no quieren tocar una ramita porque es delito o seguir desordenadamente otorgando concesiones por décadas a privados aunque el parque no se vende.
Ni hablar del ex complejo casino que se viene abajo a la vista de todos y el desopilante nombre Jardín de Rocas aguardando en un lugar más que estratégico para el interés de inversores el que solamente requiere de decisión política porque no existe ningún impedimento para que se intervenga esa esquina.
Y más allá del río un ordenamiento para Quequén que, por el atractivo de poder construirse frente al mar está creciendo exponencialmente. Todo es un cúmulo de cuestiones que, si abordaran estarían más que entretenidos los 20 concejales.
Los históricos
Todo esto, que podríamos encuadrarlo en los temas históricos sin resolución son los que hacen descreer al habitante del trabajo de los concejales, sumado a lo micro de cada día; todo es importante como saber asignar prioridades y subsanar para dejar de tirar la pelota para adelante en los grandes temas inconclusos.
Hoy las crisis de confianza de los ciudadanos corta transversalmente a muchos sectores de decisión de la vida nacional, desde la política a la justicia y hasta nivel empresarial. Cuestiones de rechazo que tienen su razonamiento y a veces en exageraciones. Si es cierto que ante una población soportando la inflación que carcome los bolsillos con la inestabilidad para emprender posibilidades, las Pymes con el estado encima como socio de ganancias y olvidadizo en las perdidas, alto desempleo y riñas a la que asistimos entre dirigentes que aspiran a ser presidente, gobernador o legislador es muy fácil el porqué del rechazo de la población a casi todos ya que muchos de ellos viven en una burbuja de su propio micro clima alejados de la realidad que pasa por su puerta.
Volviendo al fondo de este comentario, el 10 de diciembre asumirá el nuevo cuerpo con la renovación de la mitad de sus integrantes en las elecciones de este año. Diez serán nuevos concejales, tal vez algunos sean reelectos pero a todos habría que colocarle en su banca como apotegma aquella frase de Maquiavelo: “es mejor actuar y arrepentirse, que no actuar y arrepentirse».///