El Viernes Santo deparó ayer un formidable día de playa para residentes y los turistas que visitan la ciudad durante este fin de semana “extra largo”.
Desde temprano, con un suave viento desde el sector Norte y un cielo despejado en gran parte de la jornada, la temperatura se fue elevando con el paso de las horas, hasta alcanzar en las primeras horas de la tarde los 31 grados, con una sensación térmica de 35 grados.
Si bien por su extensión y la altura del calendario la amplia playa necochense no se colmó, sí se pudo observar a mucha gente disfrutando, incluso en los balnearios privados, que mañana domingo culminarán la temporada 2023-24.
El de ayer, de acuerdo a los pronósticos a partir de hoy, fue la última “yapa” veraniega en pleno otoño.///
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