Este viernes se realizará un nuevo encuentro del Ciclo “Viernes de Cine” en la sala mayor del Centro Cultural de Necochea. 

En la oportunidad, se proyectará el último trabajo del cineasta alemán Christian Petzold, Cielo rojo (Roter Himmel), donde confirma su calidad de narrador consumado, capaz de hacer un film con una riqueza de tonos -que van del humor al amor y la tragedia- muy poco frecuente en el cine actual.

En el ciclo de cine, ya se han proyectado obras de este cineasta, entre ellas, Seguridad interior, Gespenster, Yella, Triángulo, Bárbara, Ave Fénix y Transit, Undine. 

Como todos los viernes, a las 20, se compartirán una variada selección de cortos de distintas nacionalidades y temáticas. 

A las 20.30, será el turno de la película Roter Himmel (Alemania, 2023), que significa Cielo rojo, de Christian Petzold.

Una obra maestra 

La película cuenta la historia de dos amigos deciden alejarse de Berlín durante el verano y pasar unos días en una casa familiar en una playa del Báltico. Ambos son artistas, y quieren aprovechar el tiempo tranquilo para ocuparse de sus proyectos. Felix buscando inspiración para realizar un dosier fotográfico y León terminando de revisar el manuscrito de la que será su segunda novela. Sin embargo, cuando llegan la casa está ocupada, una de las dos habitaciones ha sido ya alquilada a una mujer llamada Nadja. Los tres personajes se encuentran entonces con el reto de crear un entorno agradable de convivencia, junto al cuarto en aparecer, Devid, guardacostas local, que pronto traba amistad con el grupo.

Con su maestría habitual, Petzold se encarga de defraudar siempre las expectativas y es precisamente esa imprevisibilidad la que convierte a Cielo rojo en poco menos que una obra maestra. Porque es durante muchos de sus 103 minutos una muy eficaz comedia de enredos, pero cuando empezamos a distendernos, sobrevienen los giros, se avecina el peligro, se desata la tragedia.

Fascinante, seductora, enigmática, desconcertante y embriagadora, Cielo rojo está llena de grandes momentos, de climas, de atmósferas y de conflictos que nos transportan a los más disímiles estados de ánimo. La fotografía de Hans Fromm, el uso de canciones sensuales y el aporte de cinco intérpretes en estado de gracia transforman a Cielo rojo en una experiencia tan cautivante como hipnótica. Petzold, cine en estado puro.