Una tragedia que comenzó con la desaparición de un adolescente
Hace 21 años, con una serie de incidentes se trató de desvirtuar una investigación
Hace 21 años, se produjeron daños y un robo en la quinta 17 de Octubre, ubicada en la calle 565. Los incidentes se produjeron 15 días después de que en ese lugar fuera encontrado el cuerpo sin vida del joven Maximiliano Herleim.
La muerte de Maxi conmocionó a los vecinos de Quequén. El joven había desaparecido y fue encontrado el 30 de abril de 2002.
El adolescente había salido de su casa para concurrir a una fiesta de cumpleaños de 15 y nunca llegó al encuentro.
Fue encontrado enterrado en una casa quinta del barrio Estación Quequén. Había recibido un disparo de arma de fuego en la cabeza. La autopsia determinó que fue ultimado con un revólver calibre 32.
En los días siguientes hubo amenazas a testigos y fue detenido hombre que acusó a un menor de edad por el crimen, pero los padres de la víctima creían que su hijo había visto algo y por eso lo mataron.
El hecho ocurrió hace 21 años y fue condenado por la Justicia un hombre que en ese momento tenía 24 años.
La tragedia para la familia Herleim comenzó antes de hallazgo del cuerpo. Cuando el adolescente desapareció realizaron la denuncia y comenzó la pesquisa policial y judicial, que desembocó en el macabro hallazgo del cuerpo de Herleim en un pozo de la quinta 17 de Octubre.
Los médicos de la Policía Científica extrajeron de la cabeza del adolescente un proyectil de un calibre 32, y a partir de ello, se hicieron varias diligencias en pos de avanzar en la pesquisa.
A un cumpleaños
Maxi Herleim dejó su casa para concurrir a una fiesta de cumpleaños de 15, al que nunca llegó. Posteriormente, los padres hicieron la denuncia policial y desde la Seccional Segunda se inició la búsqueda del adolescente, con todo el protocolo habitual.
Con el avance de las horas, se estableció que un presunto amigo de Maximiliano, fue la última persona que estuvo con el chico y se convirtió en el principal sospechoso de la desaparición.
Los policías hallaron el cadáver de Herleim en un sector del predio donde se emplaza la quinta 17 de Octubre y después se hizo un allanamiento en la vivienda del sospechoso, de donde se secuestraron prendas de vestir y un teléfono celular que usaba Maximiliano, pero pertenecía a su amigo.
En el domicilio del principal sospechoso de dar muerte a Carlos Maximiliano Herleim, se encontró también un revólver calibre 32 y proyectiles, mientras que los peritos de Policía Científica luego realizaron los análisis balísticos con la bala extraída de la sien de la víctima.
Los primeros procedimientos policiales y judiciales fueron encabezados por la jueza de Menores, María Angélica Bernard, pero la causa por el crimen del adolescente continuó en poder de la fiscal de turno en ese momento, Silvia Gabriele.
Finalmente el sospechoso fue condenado por la Justicia, sin embargo siempre existieron dudas sobre la motivación del crimen.///