Julieta Moreno 

Redacción 

El programa Envión, presente en los 135 municipios de la provincia de Buenos Aires, funciona desde 2011 en Necochea y Quequén con el objetivo de acompañar a adolescentes de entre 12 y 21 años en situaciones de vulnerabilidad social. Se trata de una política de responsabilidad compartida entre la Provincia y los municipios, que despliega una propuesta integral y flexible, adaptada a las realidades de cada territorio.

“El programa trabaja bajo cuatro ejes fundamentales: acompañamiento en salud, educación, formación para el empleo y lo recreativo”, explicó Jacqueline Franqui, integrante del equipo de Envión Quequén, cuya sede funciona en calle 545 entre 574 y 576. Allí, a lo largo del mes, participan cerca de 200 adolescentes en distintos talleres y propuestas. En tanto que en Necochea, la sede está en el barrio General San Martín y tiene una matrícula de 70 chicos. 

“Muchos llegan derivados por instituciones, incluso por el Servicio Local de Promoción y Protección de los Derechos del Niño”, señaló, también parte del equipo. El trabajo -aclararon- se hace a contraturno de la escuela y se busca mantener a los jóvenes vinculados a sus estudios y a espacios comunitarios. “No todos vienen todos los días, algunos hacen uno o dos talleres, otros vienen solo al apoyo escolar, y hay quienes cursan doble escolaridad y se acercan a una propuesta específica”, explicó Gastón Cabello, referente también de Envión Quequén. 

Talleres 

En Quequén, los talleres van desde apicultura, karate, cerámica, arte, peluquería, maquillaje y costura, hasta apoyo escolar. Muchos de los talleristas articulan también con el programa municipal Barrio Cultura. Además, Envión cuenta con profesionales de distintas disciplinas que conforman el equipo técnico, que acompaña cada situación en articulación con otras instituciones.

Un aspecto importante es la beca que reciben la mayoría de los adolescentes que participan del programa. “La beca hoy está en alrededor de 28.300 pesos. Es un beneficio necesario, sobre todo para las familias, pero la pertenencia al espacio va mucho más allá”, señaló Cabello, desde el equipo. En el caso de los menores de edad, la beca es percibida por sus padres o tutores.

El programa no se detiene en verano. “En invierno tenemos más actividad en sede, pero durante el verano organizamos propuestas para que los chicos no se desvinculen”, contó Franqui. “Articulamos con el Club del Valle, hicimos salidas al río, usamos la cancha de Quequén. A esa edad no hay muchas opciones, no quieren ir a las escuelas de verano porque están pensadas para los más chicos”.

En el barrio San Martín 

Del otro lado del puente, Envión Necochea funciona en el barrio General San Martín, en una casita adaptada para las actividades. “La sede está en calle 89 bis y tiene una matrícula de casi 70 chicos”, explicó Natalia Alegre, referente del equipo técnico. “Es un espacio pequeño, pero muy activo. Desde el año pasado funciona allí la primaria de adultos y este año se logró abrir Fines, que era una demanda del barrio desde que llegamos”.

El equipo técnico de Necochea está compuesto por tres personas, además de los talleristas que llevan adelante propuestas similares a las de Quequén. “La dinámica del programa y lo administrativo es igual en todos lados, pero cada sede tiene su particularidad, porque se trabaja mucho desde el territorio”, remarcó Alegre.

Aunque comenzó con adolescentes del barrio San Martín, Envión Necochea fue ampliando su alcance. “Hoy llegan chicos del 9 de Julio, Campana, el barrio Municipal y, últimamente, también del barrio Norte”, indicó.

Entre las dos sedes, el programa alcanza a unos 270 adolescentes del distrito, ofreciendo contención, herramientas, formación y un espacio donde sentirse parte. “Lo más importante es que podamos pensar con cada joven, según sus características, sus necesidades y sus deseos, una propuesta que los sostenga y los acompañe”, se indicó.

Temas

• Educación

AUTOR

Ecos Diarios

Comentarios

Para comentar, debés estar registrado

Por favor, iniciá sesión

INGRESA