Viernes 12 de marzo de 1993
Tórrida jornada con 35.3 grados
La temperatura tuvo ayer una de las marcas máximas del verano con 35.3 grados y fue la más importante de lo que promediaba de marzo. A tal punto se sintió el calor en Necochea y Quequén que numerosas escuelas del distrito debieron suspender las clases, fundamentalmente en el turno tarde, para evitar que el templado clima siguiera agobiando a alumnos y docentes.
A las 9 de la mañana la temperatura alcanzaba ya los 29.2 grados, mientras que al mediodía la columna mercurial indicaba 34 grados, con una imperceptible brisa del sector Norte.
La máxima, llegó a las 14,10 cuando se registraron 35.3 grados, cifra que se transformó en la segunda temperatura de la temporada.
En las últimas jornadas habían venido anotándose marcas superiores a los 30 grados, aunque la de la víspera sin duda era la de mayor rigor.
Pero no todos «sufrieron con el calor», porque muchos necochenses y algún turista que otro, disfrutaron del océano en plenitud y con un mar bueno que fue más que propicio para gozar de los últimos días del verano.
La temperatura máxima del verano se registró el 16 de febrero con 36.6 en una jornada de bochorno y en la que más gente acudió a nuestras playas. Para evaluar debidamente la marca de ayer debía apuntarse que superó a todas las máximas del mes de enero pasado, pues en ese período el registro superior fue de 34.2 producido en el cuarto día del año.
Por ende la de ayer era la segunda temperatura máxima del verano 93. La que ahora quedaba en tercer lugar se registró el 4 de febrero con 34.8 grados.
Para la fecha el pronóstico indicaba similares condiciones, es decir, caluroso, húmedo y viento del cuadrante Norte.
Sin clases
Un importante número de establecimientos educacionales suspendían las clases como consecuencia de la tórrida jornada que se debió soportar y cuya máxima temperatura fue de 35.3°, a las 14.10.
Las autoridades de las 48 escuelas del Distrito recibieron a media mañana un comunicado de la Secretaría de Inspección en la que se indicó que «en caso de necesidad de suspender las clases por el factor climático, será decisión Conjunta del equipo directivo, comunicando al inspector del área, y luego verá la forma de recuperar el o los días».
De esta manera, en la mayoría de los establecimientos educacionales fueron suspendidas las clases en el turno tarde.
De acuerdo al comunicado de la Secretaría de Inspección, el cuerpo directivo de cada escuela (director, vicedirector y secretario) tenía a su cargo determinar la conveniencia o no de la suspensión, de acuerdo al lugar donde esté emplazado el establecimiento, las condiciones edilicias, y la población de alumnos.
No habían tenido clases, entre otras, en la tarde de ayer las escuelas Nº 1, 2 y 3 de Necochea, pues el cuerpo directivo de los establecimientos había entendido que no era posible dictar clases en esas condiciones. Debía recordarse que al mediodía la temperatura llegaba a los 34 grados y en lo que debería ser la mitad del turno vespertino escolar (las 14) 1a marca había alcanzado los 35.3 grados.
Fútbol
El representativo de Rivadavia se consagraba ganador en el torneo zonal de fútbol, que para categoría 1981 se disputó en el centro deportivo “El Jardín», del Club lsabel la Católica.
En la competencia estaba en juego la Copa «Ciudad de Necochea» y los triunfadores se hicieron acreedores además a diez pasajes a «Mundo Marino».
En las semifinales Estación Quequén venció por penales a Jorge Newbery de Lobería por 6 a 5, tras igualar en un gol por bando, mientras que Rivadavia derrotó por 2 a 0 a Defensores de Miramar «3».
En la final Rivadavia le ganó en equilibrado cotejo 3 a 2 a Estación Quequén, mientras que por el tercer y cuarto puesto Jorge Newbery venció por 2 a la Defensores de Miramar «3.
De esta manera Rivadavia quedó primero, escoltado por Estación, Newbery y Defensores de Miramar «3 Goleador resultó Ariel Moreno (Estación), el arquero menos vencido resultó Diego Di Fiore (Newbery); el técnico más correcto fue Roque Taberna (Estación) y la hinchada más correcta la de Defensores de Miramar, que se adjudicó por ello un trofeo.///